Washington muestra interés en obtener acceso al sistema antiaéreo ruso S-400 Triumf, solicitando ayuda a Turquía, pero encontrándose con una firme negativa en nombre de la soberanía turca.
S-400 Triumf, el sistema de defensa ruso en el punto de mira
El ministro de Asuntos Exteriores de Turquía, Mevlüt Cavusoglu, ha declarado que su país no puede acceder a la petición de Estados Unidos, argumentando que dicha acción socavaría la autoridad, soberanía e independencia de Turquía.
El sistema S-400 ha sido objeto de pruebas por parte de Turquía en los últimos años, incluyendo una en la que un radar S-400 bloqueó un caza F-16 griego, causando controversia internacional.
Rusia supuestamente ha empleado el S-400 en la guerra en Ucrania, logrando interceptar y derribar un Su-27 ucraniano a una distancia de 150 km.
Estados Unidos y Turquía: tensiones sobre el S-400
Washington ha propuesto alternativas a Turquía, pero todas ellas afectan directamente a la soberanía turca, incluyendo la entrega de S-400 directamente a Ucrania, que Turquía rechazó rotundamente.
Debido a la adquisición del S-400 por parte de Turquía, Estados Unidos impuso sanciones a la industria de defensa turca y expulsó al país de su programa de cazas F-35 en 2020.
Estados Unidos retiene la entrega de jets F-35 ya encargados por Turquía, argumentando que la compra del sistema ruso pone en peligro la seguridad de la tecnología militar estadounidense.
Desacuerdos económicos y el futuro de las relaciones militares entre Turquía y EE. UU.
Washington demanda dinero de Turquía para la producción de F-35 en territorio estadounidense, mientras que Turquía se niega a pagar y exige el dinero entregado previamente para adquirir los F-35 que nunca llegaron a suelo turco.
El ministro Cavusoglu ha reiterado que Turquía no renunciará al S-400 a cambio del F-35, afirmando que los cazas F-35 ya no son de interés para el país tras la reciente presentación del primer prototipo operativo del caza turco de quinta generación, el KAAN.