El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha publicado las imágenes de una prueba reciente de un proyectil de hipervelocidad del ejército.
La Fuerza Aérea utilizó recientemente el HVP – un proyectil guiado de baja resistencia capaz de alcanzar velocidades de hasta Mach 5 – disparado desde un obús M109 Paladin del Ejército con base en 155 mm y un cañón de cubierta de la Marina para derribar un simulacro de misil de crucero durante una demostración en el polígono de tiro de White Sands en Nuevo México.
Un avión teledirigido BQM-167 “sirvió como sustituto de los misiles de crucero rusos” durante una demostración del Sistema Avanzado de Gestión de la Batalla del servicio, como informó Breaking Defense.
“El derribo de misiles de crucero con tanques es impresionante”, dijo a los periodistas el Dr. Will Roper, secretario adjunto de la Fuerza Aérea para adquisición, tecnología y logística.
Y no se equivoca. Aquí hay un GIF del momento mágico para su placer visual:
La secreta Oficina de Capacidades Estratégicas del Pentágono ha estado trabajando en el empleo del HVP a través de los cañones convencionales en lo que se llama un sistema de armas de cañones de hipervelocidad (HGWS) para derribar misiles.
Según se informa, en 2018, la Armada probó 20 proyectiles HVP de nueva generación de los cañones de cubierta de cinco pulgadas Mk 45 del USS Dewey durante el ejercicio marítimo anual del servicio Rim of the Pacific (RIMPAC).
Cuando se dispara con los cañones de pólvora convencionales de cinco pulgadas, el HVP “alcanza una velocidad de aproximadamente Mach 3, que es aproximadamente la mitad de la velocidad que alcanza cuando se dispara desde el [cañón electromagnético], pero más del doble de la velocidad de un proyectil convencional de 5 pulgadas disparado desde un cañón de 5 pulgadas”, según un informe reciente del Servicio de Investigación del Congreso.
Como Task & Purpose informó anteriormente, los actuales vehículos interceptores terrestres y marítimos del Departamento de Defensa funcionan bien contra los misiles balísticos, pero simplemente no ofrecen una oportunidad óptima de éxito contra los misiles de crucero o las armas hipersónicas que se han convertido en un importante foco de atención para los ejércitos de China y Rusia.
Pero la ventaja del HVP sobre las defensas convencionales de misiles es también una cuestión de costo: Mientras que el misil Evolved Seasparrow o el misil Rolling Airframe estándar cuestan varios millones de dólares cada uno, el director del programa HVP, Vince Sabio, había fijado previamente el costo de un HVP en alrededor de 85.000 dólares cada uno.
El HVP “está siendo diseñado para enfrentar múltiples amenazas”, como dijo Sabio en enero de 2018 “En cualquier lugar donde se pueda llevar un 155 [obús], en cualquier lugar donde se pueda llevar un DDG de la Armada, se tiene una capacidad de defensa aérea y de misiles barata y flexible”.