El F-15EX Eagle II es una actualización costosa del histórico F-15, con capacidades limitadas de sigilo.
El F-15EX y su papel en la Fuerza Aérea de los Estados Unidos
El F-15EX Eagle II es una versión actualizada del histórico F-15, diseñada para solucionar las carencias en la flota de cazas de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAF). Aunque no posee capacidades furtivas, incorpora aviónica avanzada, un radar moderno y una vida útil más larga, lo que lo hace apto para misiones que no requieren sigilo. Este avión complementará a los cazas furtivos como el F-22 y el F-35, desempeñando roles de defensa nacional y protección de bases aéreas.
El F-15EX, aunque una versión nueva de un diseño antiguo, tiene un costo elevado de entre 90 y 97 millones de dólares por unidad. Sorprendentemente caro para una actualización de una plataforma que ha estado en servicio durante casi cincuenta años, en una época en la que se esperaría que el sigilo fuera una característica estándar en los nuevos cazas estadounidenses. A pesar de no ser un avión furtivo, la USAF considera valiosa la adquisición de esta última variante del F-15. Esto se debe no solo a que las misiones previstas para el F-15EX no requieren sigilo, sino también a que la USAF ya cuenta con otras plataformas capaces de realizar misiones furtivas, como el F-22, el F-35 y el futuro caza de sexta generación NGAD (Next Generation Air Dominance).
El F-15EX es un caza multifuncional de ataque, construido por Boeing (originalmente, los F-15 fueron fabricados por McDonnell Douglas). Es un descendiente directo del F-15E Strike Eagle, el primer Eagle capaz de llevar a cabo misiones de ataque terrestre, a diferencia de las variantes iniciales diseñadas exclusivamente para combate aéreo.
Desarrollo y justificación de la adquisición del F-15EX
El desarrollo del F-15EX se dio en un contexto de escasez en la flota de cazas de la USAF. Inicialmente, la USAF esperaba recibir casi 400 F-22 para sustituir la envejecida flota de cazas de superioridad aérea F-15A-D. Sin embargo, debido a recortes presupuestarios posteriores a la Guerra Fría y al enfoque en la contrainsurgencia después de 2001, la adquisición del F-22 se redujo a menos de 200 unidades.
Esto obligó a extender la vida útil de 179 F-15C y D hasta la década de 2030 para mantener un número adecuado de cazas de superioridad aérea. Para mediados de la década de 2010, los F-15C y D se encontraban en un estado de envejecimiento tal que su mantenimiento ya no era económicamente viable. Este problema se vio agravado por los retrasos en el programa del F-35 y la detención de la producción del F-22, cuyo reinicio resultaba demasiado costoso.
Como solución, la USAF decidió adquirir la versión EX del F-15 de Boeing, similar a la versión mejorada del F-15E que Boeing había estado exportando a clientes extranjeros. Entre las mejoras del F-15EX se incluyen un radar AESA, sistemas IRST y EPAWSS, una nueva cabina, controles de vuelo mejorados y una vida útil extendida a 20.000 horas.
Limitaciones del F-15EX en el combate moderno
El F-15EX es inusual para un avión de combate estadounidense fabricado en la década de 2020, ya que no es furtivo y no se espera que pueda sobrevivir a las defensas aéreas modernas. Por ello, el F-15EX está diseñado para complementar a los aviones de quinta generación, capaces de superar las defensas aéreas contemporáneas.
Será utilizado para la defensa del territorio nacional y de bases aéreas, el cumplimiento de zonas de exclusión aérea y el despliegue de armas de distancia de seguridad en apoyo a los cazas furtivos en primera línea. En conclusión, el F-15EX no es el avión del futuro, sino una solución temporal.
Sin embargo, es un avance respecto al F-15 original de la década de 1970 y sería una valiosa incorporación para cualquier fuerza aérea del mundo.