El B-32 Dominator de Estados Unidos tuvo una breve vida operativa, entre enero y agosto de 1945, siendo superado por el más exitoso B-29 Superfortress.
El olvidado bombardero estratégico de la Segunda Guerra Mundial
En la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos fue el mayor productor de bombarderos pesados. Aunque se recuerda al B-29 Superfortress como el avión más avanzado y costoso de la época, el Consolidated B-32 Dominator surgió como una alternativa en caso de fallo del B-29.
El B-32 realizó su primer vuelo en septiembre de 1942, pero no entró en servicio hasta enero de 1945. Se fabricaron solo 118 unidades, una cifra significativamente menor a los 3.970 B-29 construidos. Estados Unidos también fabricó grandes cantidades de otros bombarderos como el B-17 Flying Fortress (12.692) y el B-24 Liberator (18.160).
Ambos modelos, B-29 y B-32, compartían características similares, incluyendo cabina presurizada, capacidad para transportar 20.000 libras de municiones y una velocidad máxima de 357 mph. Sin embargo, el Dominator experimentó varios retrasos en su desarrollo por problemas con el motor y la presurización, lo que afectó la producción a gran escala.
El B-32 como bombardero de respaldo estratégico
El desarrollo del B-32 comenzó como medida preventiva ante posibles fallos en el B-29. El Ejército estadounidense encargó a Consolidated la construcción de este avión, siguiendo la estrategia de contar con aviones paralelos, como sucedió con el B-17 y el B-24.
El Dominator debía cumplir con misiones estratégicas a larga distancia, tanto en Europa como en el Pacífico, donde se esperaba que alcanzara Tokio. Mientras tanto, el proyecto rival alemán Amerikabomber pretendía crear un bombardero capaz de llegar a Nueva York.
Datos clave del B-32 Dominator
- Tipo: Bombardero estratégico pesado
- Primer vuelo: Septiembre de 1942
- Período de servicio: Enero a agosto de 1945
- Unidades construidas: 118
- Carga útil: 20.000 libras
- Velocidad máxima: 357 mph
- Alcance: 3.800 millas
Los problemas técnicos prolongaron el desarrollo del Dominator, lo que permitió al B-29 solucionar sus fallos y consolidarse como el bombardero principal en el Pacífico. Cuando el Dominator comenzó a entrar en combate, Alemania ya había sido derrotada y Japón estaba cerca de rendirse.
Misiones limitadas en los últimos meses de la guerra
Los pocos B-32 que llegaron a operar en combate se usaron principalmente para misiones de reconocimiento. El 386.º Escuadrón de Bombardeo los desplegó en Filipinas y Okinawa para fotografiar objetivos japoneses y monitorear actividades militares.
Tras los bombardeos en Hiroshima y Nagasaki, los B-32 continuaron operando sobre Japón. Incluso después del cese de hostilidades, el 15 de agosto de 1945, los Dominator realizaron misiones de búsqueda de prisioneros de guerra y vigilancia aérea.
En una misión sobre Tokio, unos B-32 se enfrentaron a cazas japoneses en un tiroteo que duró varias horas. Posteriormente, otra escaramuza aérea se saldó con la muerte del sargento Anthony Marchione, considerado el último militar estadounidense muerto en combate aéreo durante la Segunda Guerra Mundial.
Rápida retirada y desguace del Dominator
Con la rendición de Japón, Estados Unidos desmovilizó rápidamente a gran parte de sus fuerzas aéreas. La producción del Dominator se detuvo en octubre de 1945 y la mayoría de las unidades fueron almacenadas y desguazadas en campos de aviación como Kingman Field y Walnut Ridge Field.
El Hobo Queen II, el Dominator más conocido, sufrió graves daños en Okinawa tras varios accidentes durante operaciones de mantenimiento, lo que llevó a su destrucción. Esta historia fue común para muchos bombarderos de la posguerra, como el Convair B-36 Peacemaker, retirado en 1959.