La modernización del F-22 incluiría sensores avanzados, armas y conectividad para mantener su ventaja aérea frente a aviones furtivos.
El desarrollo de nuevos sensores avanzados para el F-22
Los sensores desarrollados originalmente para la plataforma Next Generation Air Dominance (NGAD), destinada a reemplazar al F-22, podrían también ser adaptados a este último. Este avance permitiría prolongar la vida operativa del F-22, un avión que ya tiene tres décadas en servicio, extendiéndola hasta la década de 2030.
De acuerdo con el general de brigada de la Fuerza Aérea Jason Voorheis, “el equipo del F-22 está centrado en implementar una hoja de ruta para desplegar sensores avanzados, conectividad y nuevas capacidades”. Añadió que recientemente se llevaron a cabo seis pruebas de vuelo exitosas que demostraron el funcionamiento de estos sistemas.
Aunque los detalles sobre estos sensores permanecen clasificados, algunas fuentes indican que las cápsulas delgadas empleadas en las pruebas incluyen sistemas de búsqueda y seguimiento por infrarrojos (IRST). Estas tecnologías mejorarían la capacidad del F-22 para localizar aviones furtivos, como los que actualmente están desarrollando Rusia y China.
Datos clave sobre los avances en los sensores del F-22
- Los sensores podrían extender la vida útil del F-22 hasta la década de 2030.
- Incluyen sistemas de búsqueda y seguimiento por infrarrojos (IRST).
- Mejorarán la detección de aviones furtivos como el Su-57 ruso y el J-20 chino.
- Las pruebas de vuelo demostraron con éxito su funcionalidad.
Factores que motivan la modernización del F-22
Los avances tecnológicos de países como Rusia y China han influido en la decisión de modernizar el F-22. Aunque este avión continúa siendo el caza de superioridad aérea líder a nivel mundial, su tecnología furtiva ha quedado anticuada frente a las crecientes capacidades de los sistemas de defensa aérea enemigos.
Los aviones de próxima generación, como el NGAD y el F-35, destacan por poseer una firma radar (RCS) más baja, algo que el F-22 no puede igualar en su configuración actual. Esto pone al Raptor en desventaja cuando opera en espacios aéreos disputados.
No obstante, la modernización del F-22 busca abordar estas limitaciones. Los nuevos sensores proporcionarán al avión la capacidad de mantener su ventaja táctica de ser “el primero en detectar, el primero en disparar y el primero en derribar”, según Voorheis.
El futuro incierto del programa NGAD
El NGAD, destinado a sustituir al F-22, ha enfrentado dificultades significativas debido a su alto costo. Se estima que cada unidad tendría un precio superior a los 300 millones de dólares, lo que ha llevado a la Fuerza Aérea a pausar el programa mientras se buscan alternativas más económicas.
Actualmente, los esfuerzos se centran en reducir el costo por unidad a unos 90 millones de dólares, una cifra más comparable a la del F-35 o el F-15EX. A pesar de este obstáculo, el NGAD sigue siendo una prioridad estratégica a largo plazo para las fuerzas armadas estadounidenses.
Mientras tanto, la tecnología desarrollada para el NGAD también se está integrando en los esfuerzos de modernización del F-22. Según Voorheis, esta tecnología “apoya todos los programas futuros” y será aprovechada en diversas plataformas de combate aéreo.
El rol estratégico del F-22 en el escenario global
El principal desafío que enfrentará el F-22 actualizado son los aviones de quinta generación desarrollados por Rusia y China, específicamente el Su-57 y el J-20. Aunque ni rusos ni chinos han igualado a Estados Unidos en cantidad o calidad de cazas, ambos países han avanzado notablemente en tecnología furtiva.
Para mantenerse por delante de sus competidores, Estados Unidos continúa invirtiendo fuertemente en el desarrollo aeroespacial, modernizando sus flotas actuales mientras desarrolla nuevas plataformas como el NGAD. Este enfoque garantiza que el F-22, con sus futuras actualizaciones, seguirá siendo un elemento clave en la superioridad aérea estadounidense.