El Lockheed Martin F-22 Raptor, con su combinación de sigilo, supercrucero y maniobrabilidad, mantiene su supremacía aérea. A pesar de la competencia del J-20 y el Su-57, sigue sin rival en combate aire-aire.
Las capacidades del F-22 lo mantienen como el rey del combate aéreo
Desde su entrada en servicio en 2005, el F-22 Raptor ha sido considerado el caza de superioridad aérea más avanzado. Su combinación de sigilo extremo, maniobrabilidad y aviónica de última generación lo convierten en una plataforma sin igual en combate.
Su firma de radar de apenas 0,0001 m² lo hace prácticamente invisible a los radares enemigos, una ventaja crucial sobre cazas como el F-35 (0,001 m²) o el Su-57 (0,1-1 m²). Además, sus motores Pratt & Whitney F119-PW-100 le permiten alcanzar Mach 2,25 y mantener supercrucero a Mach 1,5 sin postcombustión, superando al F-35 y al J-20.
La aviónica del F-22, con el radar AESA AN/APG-77 y sistemas de guerra electrónica avanzados, le otorga al piloto una ventaja táctica decisiva. En Red Flag 2007, los F-22 lograron una relación de bajas de 144 a 0 contra cazas como el Eurofighter Typhoon y el F-111C, consolidando su dominio en combate.
Ventajas y limitaciones del F-22 frente a otros cazas
El F-22 está diseñado exclusivamente para la superioridad aérea, con armamento interno que preserva su sigilo. Sus misiles AIM-120 AMRAAM y AIM-9 Sidewinder lo hacen letal en enfrentamientos aire-aire, pero su falta de capacidades de ataque a tierra lo hace menos versátil que el F-35 Lightning II, que ha sido adoptado globalmente con más de 1.000 unidades en servicio.

Con un costo unitario de 150 millones de dólares, la producción del F-22 se limitó a 187 unidades, de las cuales 183 siguen operativas en 2025. En comparación, el F-35, más barato (115 millones) y flexible, ha superado al F-22 en número y despliegue internacional.
Comparación clave entre el F-22, J-20 y Su-57
- Sigilo: El F-22 tiene una RCS de 0,0001 m², menor que la del J-20 (0,01-0,1 m²) y la del Su-57 (0,1-1 m²).
- Velocidad: Puede alcanzar Mach 2,25, superando al J-20 (Mach 2 estimado) y al F-35 (Mach 1,6).
- Producción: Solo 183 F-22 siguen en servicio, frente a los 250+ J-20 y menos de 10 Su-57 operativos.
- Supercrucero: Es el único caza en servicio con supercrucero operativo (Mach 1,5 sin postcombustión).
- Maniobrabilidad: Capaz de giros de hasta 9 G, lo que lo hace altamente ágil en combate cercano.
El futuro del F-22 y la evolución del combate aéreo
Hasta 2017, ningún otro caza de quinta generación representaba una amenaza directa para el F-22. Sin embargo, la llegada del J-20 chino y el Su-57 ruso ha generado preocupaciones sobre el dominio absoluto del Raptor. Aunque en simulaciones el F-22 sigue imponiéndose, tecnologías emergentes, como los radares de baja frecuencia y los misiles PL-15 con alcance de 200 km, podrían reducir su ventaja.

La Fuerza Aérea de EE. UU. ha destinado 7.800 millones de dólares para modernizar entre 140 y 150 Raptors hasta 2030, mejorando sensores, software y armamento, incluyendo el misil AIM-260 JATM. Este esfuerzo busca contrarrestar el creciente número de J-20 y el avance de nuevas tecnologías.
El NGAD y el futuro de la supremacía aérea
El programa Next Generation Air Dominance (NGAD), previsto para 2030, complementará al F-22 con una plataforma de sexta generación enfocada en sistemas autónomos y mayor alcance. Sin embargo, el NGAD no reemplazará al Raptor de inmediato, lo que indica que el F-22 seguirá siendo crucial en la defensa aérea de EE. UU. al menos hasta 2040.
Si bien el desarrollo de tecnologías avanzadas plantea desafíos para el F-22, su combinación de sigilo, supercrucero y agilidad sigue sin rival. Aunque ya no es la única opción, en combates aire-aire sigue siendo el estándar de referencia.