El F-47 NGAD, anunciado por Trump, será un centro aéreo de mando capaz de integrar drones, satélites y fuerzas terrestres en tiempo real.
Boeing obtiene contrato para el desarrollo del nuevo F-47 NGAD
El 21 de marzo de 2025, Donald Trump confirmó que Boeing desarrollará el F-47, el caza de sexta generación del programa Next Generation Air Dominance (NGAD). Este proyecto representa un cambio estratégico en el enfoque del combate aéreo, al centrarse en la capacidad de gestión integral del espacio de batalla más allá de las funciones tradicionales de un caza.
Durante el anuncio oficial desde la Casa Blanca, Trump resaltó la selección de Boeing como un paso fundamental en la modernización de las capacidades aéreas de Estados Unidos. Este avión será el primero de su tipo en actuar como un nodo central de mando, coordinando operaciones en múltiples frentes a través de sistemas interconectados.
El F-47 superará en alcance, sigilo y sostenibilidad a los cazas actuales, posicionándose como el componente principal de una red integrada de combate. Funcionará como una plataforma de procesamiento y distribución de datos en tiempo real, proporcionando información táctica a unidades aéreas y terrestres.
David Allvin, jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea, indicó que el concepto de “Dominio Aéreo” guía todo el desarrollo del NGAD. El F-47 será esencial para mantener la superioridad militar frente a potencias como China y Rusia, cuyas capacidades antiaéreas y electrónicas continúan en expansión.
La integración de sensores y redes define su superioridad táctica
A diferencia de modelos anteriores como el F-22 Raptor y el F-35 Lightning II, el F-47 está diseñado como un multiplicador de fuerza, gracias a su capacidad para redistribuir datos tácticos a través de enlaces avanzados. Esta funcionalidad permitirá la coordinación simultánea de unidades aéreas y terrestres.

El nuevo caza contará con una arquitectura centrada en la conectividad total, que integrará sensores externos, satélites y plataformas aliadas, extendiendo su alcance más allá del horizonte. Esto aumentará significativamente la capacidad de detección y respuesta ante amenazas en cualquier entorno operativo.
Las funciones tradicionales de combate del piloto pasarán a un segundo plano frente a su rol como gestor del entorno operativo. El F-47 operará como nodo de comando para el análisis y distribución de inteligencia en tiempo real, asegurando una respuesta coordinada y efectiva en escenarios complejos.
Según Allvin, esta red táctica redefinirá la forma en que se ejecutan las operaciones militares aéreas, convirtiendo al F-47 en un componente esencial del sistema de defensa estadounidense ante desafíos modernos como los sistemas antiaéreos de largo alcance.
Características avanzadas del F-47 NGAD de Boeing
- Permitirá el mando directo de drones de combate autónomos o “Alas Leales”.
- Procesará y redistribuirá información táctica a otras plataformas aéreas y terrestres.
- Integrará enlaces de datos con el B-21 Raider y sistemas de defensa Patriot.
- Estará equipado con arquitectura abierta para facilitar futuras actualizaciones.
- Utilizará propulsión adaptativa para mantener velocidades supersónicas extendidas.
- Contará con alcance superior a 1,000 millas náuticas y mayor disponibilidad operativa.
El F-47 liderará operaciones con drones de combate colaborativo
Además de sus capacidades individuales, el F-47 controlará drones de combate conocidos como Aviones de Combate Colaborativo (CCA), integrándolos en misiones tácticas como reconocimiento y ataque electrónico. Estos drones, desarrollados por General Atomics y Anduril, llevarán la designación oficial YFQ.
Los modelos YFQ-42A y YFQ-44A actuarán como extensión del F-47, ejecutando tareas de apoyo bajo su dirección directa. Este nivel de coordinación autónoma marca una diferencia significativa frente a cazas como el F-35, que incorporaron esta capacidad en fases posteriores con resultados limitados.
El control de enjambres de drones desde el F-47 permitirá ataques simultáneos, saturación de defensas enemigas y acciones sincronizadas en múltiples puntos del campo de batalla. Esta función lo posiciona como plataforma central en operaciones aéreas distribuidas.

Al diseñarse desde su origen para estas funciones, el F-47 representa un salto en la integración entre plataformas tripuladas y no tripuladas, estableciendo un nuevo estándar para la guerra aérea moderna con capacidades que otros cazas no pueden igualar.
Detalles técnicos y ventajas operativas frente a generaciones anteriores
Aunque muchos detalles técnicos permanecen reservados, la Fuerza Aérea confirmó que el F-47 será más asequible y numeroso que el F-22. Su diseño modular y adaptable permitirá integrar sensores y comunicaciones de nueva generación a medida que las amenazas evolucionen.
La arquitectura abierta del F-47 facilitará la implementación rápida de mejoras de software y hardware. Este enfoque contrasta con la complejidad técnica del F-35, cuya dependencia de actualizaciones como el Technology Refresh 3 ha afectado su despliegue efectivo y su costo.
Con un alcance superior a 1,000 millas náuticas y mayor sostenibilidad, el F-47 podrá operar en zonas extensas sin necesidad de repostaje frecuente. Su mayor disponibilidad operativa lo convierte en un recurso confiable en misiones prolongadas y escenarios cambiantes.
Estas características refuerzan su papel como gestor táctico del espacio de batalla, capaz de mantenerse conectado y operativo durante largas campañas aéreas, incluso frente a defensas y entornos electromagnéticos hostiles.
Boeing lidera el NGAD mientras Lockheed queda fuera del F/A-XX

Este contrato representa un cambio importante en la industria de defensa estadounidense. Mientras Boeing asegura el NGAD, la Marina se prepara para adjudicar el desarrollo del F/A-XX, un caza de sexta generación diseñado para operaciones embarcadas.
La Armada ha rechazado un diseño común con el NGAD, debido a los problemas experimentados con el F-35. Esta decisión dejó fuera del programa F/A-XX a Lockheed Martin, quien ya había sido eliminado del NGAD, perdiendo así participación en ambos desarrollos.
Con la salida de Lockheed, Northrop Grumman se perfila como favorito para liderar el F/A-XX, gracias a su experiencia con el bombardero B-21 y tecnologías furtivas. Este giro en la industria redistribuye el liderazgo en el desarrollo de cazas avanzados.
La posición de Boeing con el F-47 marca un nuevo equilibrio en la competencia entre contratistas militares, mientras Lockheed podría quedar relegado a programas secundarios tras décadas de protagonismo con el F-22 y el F-35.