La versión mejorada J-20A de China incluye motores WS-15. El F-22 Raptor estadounidense incluye motores F119-PW-100. Ambos aviones se utilizan en misiones de control del espacio aéreo.
Características operativas del J-20A en la Fuerza Aérea china
La Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación de China opera el J-20A, una versión mejorada del caza de quinta generación J-20, que incluye motores nacionales WS-15. Estos motores proporcionan un empuje mayor y capacidad de vuelo supersónico sostenido. La Fuerza Aérea de Estados Unidos opera el F-22 Raptor, un caza para misiones de control del espacio aéreo con motores F119-PW-100 que generan 35.000 libras de empuje cada uno y permiten velocidades por encima de Mach 2, según informes oficiales del Departamento de Defensa estadounidense.
El J-20, fabricado por la Corporación de la Industria Aeronáutica de China, entró en servicio operativo en 2018 con su variante J-20A, que incorpora motores fabricados en el país en lugar de los importados de Rusia. Este aparato incluye dos motores y se diseña para misiones de control del espacio aéreo y ataque. Alcanza un peso máximo de despegue estimado en 37.000 kilogramos y un radio de combate aproximado de 2.000 kilómetros. Sus capacidades incluyen un radar de matriz activa de escaneo electrónico y la integración de misiles aire-aire PL-10 y PL-15, que se almacenan en compartimentos internos para mantener características de baja observabilidad.
La producción ha aumentado, con más de 200 unidades en servicio para 2023, y el Grupo de la Industria Aeronáutica de Chengdu expandió su capacidad con una nueva planta de ensamblaje en ese año. El despliegue se concentra en los comandos teatrales oriental y sureño, donde el aparato se utiliza en objetivos estratégicos en el estrecho de Taiwán y el mar de China Meridional, y se integra en operaciones coordinadas con sistemas no tripulados y de ataque a larga distancia.
Las mejoras en el J-20A incluyen la transición a motores WS-10 y el desarrollo continuo de los WS-15, que proporcionan un empuje mayor y permiten el vuelo supersónico sin postquemadores, además de toberas de empuje vectorial para mayor maniobrabilidad. En octubre de 2021, se reveló una variante de dos asientos en redes sociales chinas, que incorpora tecnologías más modernas para operaciones conjuntas. El aparato participó en ejercicios de entrenamiento en abril de 2022 durante operaciones del portaaviones Shandong en el mar de Filipinas.
Especificaciones clave de armamento y despliegue
- Misiles aire-aire PL-10 y PL-15 almacenados en compartimentos internos.
- Más de 200 unidades en servicio para 2023.
- Despliegue en comandos teatrales oriental, sureño, occidental y norteño.
- Variante de dos asientos revelada en octubre de 2021.
Desarrollo y capacidades técnicas del F-22 Raptor estadounidense
La Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación distribuye estos cazas de quinta generación en comandos teatrales del este, sur, oeste y norte, mientras que el comando central utiliza principalmente aparatos más antiguos. Estas unidades forman parte de una flota que prioriza el ataque ofensivo a larga distancia y la utilización de poder aéreo, con énfasis en la indigenización de componentes para reducir la dependencia de tecnología extranjera.
El F-22 Raptor, producido por Lockheed Martin y Boeing, inició su desarrollo en la década de 1980 como el Caza Táctico Avanzado para reemplazar al F-15. El prototipo YF-22 voló por primera vez en septiembre de 1990, y el modelo seleccionado incorpora motores Pratt & Whitney F119, elegidos sobre los General Electric F120. Con un peso vacío de aproximadamente 40.000 libras y un máximo de despegue de 83.500 libras, el F-22 mide 62 pies de largo, 44 pies y 6 pulgadas de envergadura y 16 pies y 8 pulgadas de altura.
Sus motores turbofan con postquemadores y toberas de empuje vectorial bidimensional permiten una velocidad de Mach 2 y un supercrucero por encima de Mach 1,5 sin postquemadores, con un techo operativo superior a 50.000 pies y un alcance de ferry de más de 1.850 millas con tanques externos.
El armamento del F-22 incluye un cañón M61A2 de 20 milímetros con 480 rondas, dos misiles AIM-9 en bahías laterales internas y seis AIM-120 en bahías principales para configuración aire-aire, o dos municiones de ataque directo conjunto GBU-32 de 1.000 libras junto con misiles AIM-120 y AIM-9 para misiones aire-tierra. Futuras mejoras incorporan radar actualizado y hasta ocho bombas de diámetro pequeño. La capacidad de combustible interna es de 18.000 libras, extensible a 26.000 con dos tanques externos en alas.
Comparación estratégica y despliegue en contextos operativos
El aparato integra avances en tecnologías de baja observabilidad, como materiales compuestos absorbentes de radar y sensores pasivos, que reducen la firma infrarroja y radar, junto con comunicaciones de baja probabilidad de interceptación. Su suite de sensores fusiona datos de fuentes internas y externas en una pantalla única de batalla, que opera solo en la cabina.
El F-22 alcanzó capacidad operativa inicial en diciembre de 2005 con el Escuadrón de Caza 27 de la Primera Ala de Caza en la Base Aérea de Langley. La producción total se limitó a 183 unidades debido a restricciones presupuestarias y extensiones de vida útil del F-15, aunque originalmente se planearon 750. El costo unitario es de $143 millones, y el programa total estimado en $65.200 millones para 184 aparatos en 2006.
Las organizaciones principales que lo operan incluyen el Comando de Educación y Entrenamiento Aéreo, el Comando de Combate Aéreo y las Fuerzas Aéreas del Pacífico. El diseño incluye la combinación de sigilo, supercrucero, maniobrabilidad y aviónica integrada, con avances en controles de vuelo y relación empuje-peso que permiten superar a aparatos actuales y proyectados.
En el contexto de las fuerzas aéreas, el J-20A se integra en una flota que incluye misiles PL-15 y PL-17 con alcances mayores a sus equivalentes estadounidenses AIM-9X y AIM-120, según evaluaciones del Departamento de Defensa. El F-22, por su parte, reduce las envolventes de compromiso de misiles superficie-aire y minimiza la capacidad de rastreo enemigo mediante su sigilo y supercrucero. Ambas aeronaves forman parte de esfuerzos de modernización: los desarrollos en China apuntan a alcanzar estándares occidentales en cazas de quinta generación, y los de Estados Unidos conservan características técnicas avanzadas en el dominio aéreo, con el F-22 en la Fuerza de Tarea de Ataque Global.