En el actual conflicto ucraniano, el desempeño del T-90 no ha alcanzado las expectativas previas y sus armazones yacen en el campo de batalla.
Análisis inicial y contexto histórico del T-90
El T-90, heredero de un programa soviético, nace en un contexto de diversificación de carros de combate. A diferencia de la tendencia de los ejércitos modernos hacia un modelo unificado de carro de combate principal, el ejército soviético operaba con una tríada de modelos: T-64, T-72 y T-80. Esta variedad, aunque eficaz en teoría, generó una carga logística y de suministros considerable. En 1986, el Objeto 188 se concibió como una mejora del T-72 para mitigar este problema, dando origen al T-90.
Exteriormente, el T-90 retiene similitudes con sus predecesores, T-72 y T-80. Sin embargo, esta similitud superficial encubre mejoras significativas, tanto en capacidades defensivas como ofensivas.
Defensivamente, el T-90 incorpora un blindaje compuesto avanzado y blindaje reactivo explosivo, optimizado para contrarrestar misiles entrantes. El sistema de contramedidas Shtora-1 integra deslumbradores infrarrojos, dispensadores automáticos de humo y un sistema de alerta láser para advertir a la tripulación de misiles entrantes.
Capacidades ofensivas y propulsión del T-90
Ofensivamente, el T-90 está armado con un cañón de ánima lisa de 125 mm, respaldado por un sistema de control de tiro de alta precisión. La tecnología de imágenes térmicas e infrarrojas permite al tanque atacar objetivos a distancias de hasta 8.000 metros. A diferencia del T-80, el T-90 utiliza una variedad de motores diésel en lugar del motor de turbina de gas, abordando así las preocupaciones sobre el consumo y fiabilidad del motor del T-80.
A pesar de estas mejoras, el desempeño del T-90 ha sido mixto en diversos conflictos. En Chechenia, por ejemplo, su rendimiento fue controvertido, con algunos informes de vehículos incapacitados por granadas propulsadas por cohetes (RPG) a corta distancia, mientras que otros reportes destacan su resiliencia bajo fuego intenso.
En la Guerra Civil Siria, un T-90 demostró su capacidad defensiva al sobrevivir un impacto frontal directo de un misil antitanque estadounidense.
El T-90 en Ucrania: Desafíos y Limitaciones
En el actual conflicto ucraniano, el desempeño del T-90 no ha alcanzado las expectativas previas. El seguimiento militar por parte de Oryx ha documentado 61 pérdidas de T-90 desde el inicio del conflicto. Estas pérdidas, sin embargo, pueden no reflejar plenamente el diseño y capacidades del tanque.
La mayor parte de los combates en Ucrania se han producido en entornos urbanos o suburbanos, donde los espacios reducidos limitan la eficacia de la guerra de tanques. Además, las nuevas amenazas, como las municiones de retardo y las municiones guiadas antitanque de ataque superior, han desafiado las capacidades defensivas del T-90, particularmente su sistema Shtora.
Finalmente, los factores humanos y tácticos han influido en su desempeño. La doctrina táctica rusa y la formación de los operadores han sido insuficientes, limitando la eficacia del T-90 en el campo de batalla. Este análisis resalta la importancia de la sinergia entre tecnología avanzada y tácticas adecuadas para lograr la dominancia en el combate moderno.