El USS Enterprise (CVN-65) revolucionó las operaciones navales con su propulsión nuclear y capacidad ofensiva sin precedentes.
Transformación de las operaciones navales con el USS Enterprise
El USS Enterprise (CVN-65) fue el primer portaaviones de propulsión nuclear del mundo, transformando las operaciones navales gracias a su alcance y durabilidad inigualables. Este buque, que entró en servicio en 1961, tuvo un papel esencial tanto durante la crisis de los misiles en Cuba como en las operaciones en Afganistán tras los atentados del 11 de septiembre.
Conocido por su gran tamaño y tecnología avanzada, el Enterprise podía operar indefinidamente sin necesidad de reabastecimiento, permitiendo a Estados Unidos proyectar su poder en cualquier lugar del mundo. Aunque fue retirado del servicio en 2012 después de 51 años de operación, sigue siendo un símbolo de la innovación naval y la superioridad estratégica de la Armada.
El CVN-65 fue el octavo buque en la historia de la Armada estadounidense en llevar el nombre Enterprise, su condición de primer portaaviones de propulsión nuclear marcó un hito en la proyección global de las fuerzas estadounidenses. Algunos consideran que este portaaviones podría ser el más importante y eficaz de toda la historia de la Armada estadounidense.
Capacidades únicas del USS Enterprise y su impacto estratégico
Los portaaviones son únicas piezas de tecnología militar, funcionando como aeródromos móviles que pueden situarse en cualquier punto de los océanos, cubriendo el 75% de la superficie terrestre. Son comparables a bases aéreas en suelo extranjero, pero con la ventaja de ser ubicaciones flexibles, permitiendo a Estados Unidos desplegar poder aéreo en cualquier continente.
Antes del Enterprise, los portaaviones dependían de combustibles no nucleares como el diésel, lo cual requería reabastecimiento constante y limitaba su autonomía y alcance, además de presentar retos logísticos. Sin embargo, con la introducción de la propulsión nuclear, el Enterprise podía operar en el mar indefinidamente, eliminando la necesidad de reabastecimiento frecuente.
Estados Unidos practica una política exterior activa y aventurera, y la capacidad de resistencia y alcance del Enterprise —junto con la flota posterior de buques de propulsión nuclear— parece reflejar esta actitud. En la actualidad, Estados Unidos cuenta con once submarinos de propulsión nuclear, capaces de patrullar los océanos indefinidamente, una capacidad utilizada ampliamente por los líderes estadounidenses.
Especificaciones técnicas y logros del USS Enterprise
El USS Enterprise es el buque de guerra más largo jamás construido, con 340 metros de largo, apenas 91 metros más corto que el Empire State Building y solo tres metros más corto que el RMS Queen Mary 2. Este portaaviones supera en más de cien metros al famoso RMS Titanic. Con una manga de 40 metros en la línea de flotación y un calado de 11 metros, el Enterprise era propulsado por ocho reactores nucleares Westinghouse A2W, que movían cuatro turbinas de vapor y cuatro ejes de hélice, generando 280.000 caballos de fuerza.
Esto le permitía alcanzar velocidades de 33,6 nudos por hora. La capacidad ofensiva del Enterprise se centraba en los más de 60 aviones que transportaba, pero también contaba con armamento significativo, incluyendo un prototipo del Sistema Básico de Misiles de Defensa de Punto (BPDMS) y lanzadores de misiles Sea Sparrow. Posteriormente, se equipó con dos lanzadores de misiles RIM-116 Rolling Airframe de 21 celdas.
El Enterprise fue comisionado en 1961, justo a tiempo para la Crisis de los Misiles de Cuba. Durante este conflicto, fue uno de los cinco portaaviones estadounidenses que participaron en el bloqueo naval, contribuyendo a evitar la entrega de misiles soviéticos y ayudando a resolver la crisis.
Participación en conflictos clave y retiro del USS Enterprise
Cuarenta años después, en respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre, el Enterprise volvió al Golfo Pérsico y sus aviones realizaron cientos de misiones contra Al Qaeda y los talibanes en Afganistán.
Finalmente, el Enterprise fue retirado del servicio en diciembre de 2012, después de medio siglo de operación.
El legado del USS Enterprise (CVN-65) perdura como un ejemplo de innovación y capacidad estratégica en la historia naval de Estados Unidos.