El prototipo YFQ-42A realizó su primer vuelo, lo que acelera el programa de aeronaves colaborativas y fortalece la integración con B-21 Raider.
Primer vuelo del YFQ-42A acelera avance del programa CCA en menos de dos años
El Departamento del Aire de Estados Unidos anunció que el prototipo YFQ-42A, desarrollado por General Atomics Aeronautical Systems, realizó su primer vuelo en una instalación de pruebas en California, lo que acelera el avance del programa de aeronaves de combate colaborativas y fortalece la integración prevista con el bombardero B-21 Raider, según comunicados oficiales emitidos el 27 de agosto de 2025.
Este hito se alcanzó en menos de dos años desde el inicio del programa, en abril de 2024, y recopiló datos sobre la capacidad de vuelo, la autonomía y los sistemas de misión del aparato. El YFQ-42A forma parte de un esfuerzo para desplegar aeronaves no tripuladas que operen junto a plataformas tripuladas de quinta y sexta generación, incluido el B-21, con el fin de extender el alcance y la letalidad en operaciones aéreas, según las directrices establecidas por la Fuerza Aérea estadounidense.
El vuelo del YFQ-42A se llevó a cabo en coordinación con la Fuerza Aérea, que seleccionó a General Atomics y a Anduril Industries para construir prototipos representativos de producción. El aparato despegó y aterrizó sin incidentes, y los datos obtenidos evalúan su idoneidad para misiones semiautónomas, con un radio de combate superior a 700 millas náuticas y características de baja detectabilidad.
Today's successful flight of the YFQ-42A Collaborative Combat Aircraft (CCA) by @GenAtomics_ASI for the @usairforce shows what is possible when innovative acquisition meets motivated industry! (1/2) pic.twitter.com/XpRRj9Zuvv
— Office of the Secretary of the Air Force (@SecAFOfficial) August 27, 2025
General Atomics aplicó ingeniería digital basada en modelos para acelerar el desarrollo, y el núcleo de autonomía del YFQ-42A se entrenó durante más de cinco años en pruebas con el MQ-20 Avenger, una aeronave a reacción no tripulada. La designación YFQ-42A, asignada en marzo de 2025, incluye el prefijo “Y” para prototipo, “F” para aeronave de caza y “Q” para no tripulada, mientras que Anduril desarrolla el YFQ-44A, cuyo vuelo se espera en breve.
Características clave del programa de aeronaves colaborativas
- Ambas plataformas forman el incremento inicial del programa, con una decisión de producción competitiva prevista para el año fiscal 2026.
- El programa busca fabricar al menos 1.000 unidades asequibles y modulares, capaces de realizar misiones como ataques, reconocimiento, guerra electrónica y actuar como señuelos.
- Estas aeronaves incorporan arquitecturas abiertas que permiten actualizaciones continuas en autonomía y sistemas de misión, lo que reduce riesgos mediante competencia entre proveedores.
- Las pruebas se extienden a la Base Aérea Edwards, en California, para evaluaciones independientes, y a la Unidad de Operaciones Experimentales en la Base Aérea Nellis, en Nevada, para valoraciones operativas.
Desarrollo y pruebas del YFQ-42A derivan de conceptos probados en XQ-67A
El enfoque en equipo humano-máquina optimiza el rendimiento en combate, y el YFQ-42A deriva del concepto de género-especie probado en el XQ-67A, que voló por primera vez en 2024, con modificaciones en la entrada de aire y las líneas del fuselaje para mejorar la discreción radar.
En paralelo, el B-21 Raider, fabricado por Northrop Grumman, avanza en sus pruebas de vuelo, con el segundo ejemplar previsto para despegar antes de finales de 2025, según indicó el general Thomas Bussiere, comandante del Mando de Ataque Global de la Fuerza Aérea.
El primer B-21 realizó su vuelo inicial en noviembre de 2023 desde la Planta 42 de la Fuerza Aérea en Palmdale, California, y finalizó en la Base Aérea Edwards. Este bombardero de ataque penetrante, de largo alcance y alta supervivencia, reemplazará gradualmente a los B-1 y B-2, con una arquitectura de sistemas abiertos que facilita la integración de futuras modernizaciones.
La Fuerza Aérea planea adquirir al menos 100 unidades, aunque líderes como el general Bussiere han sugerido incrementar el número a 145 para fortalecer la disuasión estratégica. La integración de aeronaves de combate colaborativas con el B-21 Raider se considera en etapas posteriores del programa, una vez que las plataformas maduren en operaciones con aeronaves de caza.
Integración de CCA con B-21 Raider amplía flexibilidad en misiones de largo alcance
Fuentes del Mando de Ataque Global indican que las aeronaves no tripuladas podrían escoltar bombarderos, lo que extiende su flexibilidad operativa, aunque por ahora se prioriza su maduración en entornos tácticos. Conceptos de otros proveedores, como Lockheed Martin, exploran diseños compactos que permitan el transporte de estas aeronaves en plataformas no de caza, incluido el B-21, lo que amplía las opciones para misiones de largo alcance.
El B-21, diseñado con cualidades de sigilo actualizadas y flexibilidad en misiones, incorpora pruebas estáticas completadas con éxito en septiembre de 2024 para validar su integridad estructural. El programa de aeronaves de combate colaborativas representa un modelo de adquisición rápida, con prototipos conceptualizados hace menos de dos años y listos para vuelo en meses.
General Atomics resalta un entorno de producción de alto volumen para entregar más de 1.000 unidades en plazos acelerados, mientras que la Fuerza Aérea integra múltiples soluciones de proveedores para mitigar riesgos. El YFQ-42A, con su enfoque en operaciones aire-aire, complementa el radio de combate y la baja observabilidad del B-21, que ha completado vuelos de prueba con acompañantes como el T-38 en agosto de 2025.
La Fuerza Aérea evalúa incrementar la flota de B-21 para alinear con las capacidades de las aeronaves colaborativas, según reportes de diciembre de 2024. Las pruebas del YFQ-42A incluyen validación de rendimiento y preparación para vuelos futuros, con énfasis en la interoperabilidad con sistemas de sexta generación.
Avances en pruebas del B-21 Raider hacia misiones de combate en 2026
El B-21, por su parte, avanza hacia pruebas de combate en 2026, con capacidad para misiones de larga duración y reabastecimiento en vuelo que mantiene su bajo perfil radar, salvo en fases específicas de repostaje.
🚨🇺🇸 US end time B-21 Raider flies for the first time. pic.twitter.com/G0J1GgLyAE
— Terror Alarm (@Terror_Alarm) November 10, 2023
El Departamento del Aire destaca que estas plataformas redefinen el espacio de batalla, con el vuelo del YFQ-42A como paso clave para la entrega de las primeras unidades de producción.
La colaboración entre la Fuerza Aérea y General Atomics logró el hito en poco más de un año, desde la selección en abril de 2024 hasta el vuelo en agosto de 2025.