En el marco del Salón Aeronáutico de Zhuhai, Rusia ha confirmado la primera venta internacional de su caza de quinta generación Su-57. Sin embargo, la identidad del comprador aún no ha sido revelada, lo que ha generado especulaciones en torno a quién podría haber adquirido esta aeronave. El Su-57 es reconocido por sus características avanzadas, como su sigilo, maniobrabilidad y velocidad de crucero, aunque su desarrollo ha enfrentado retrasos y su participación en combate ha sido limitada.
La noticia de esta transacción marca un hito en la historia del Su-57, ya que representa su primera exportación oficial. A pesar de ello, el comprador no ha sido identificado, lo que ha originado una serie de preguntas sobre quién podría haber adquirido este modelo. ¿Es posible que China sea el comprador?
El Su-57 es el primer caza de quinta generación fabricado por Rusia. Equipado con dos motores, este avión posee las características típicas de los cazas de su clase: sigilo, supermaniobrabilidad, supercrucero, aviónica avanzada y compartimentos internos de armas. Sin embargo, su desarrollo ha sido complejo, con retrasos significativos en su producción y sobrecostos.
Aunque el avión realizó su primer vuelo en 2010, su entrada en servicio activo fue tardía, y su uso en la guerra entre Rusia y Ucrania ha sido limitado. A pesar de que fue diseñado en parte con la exportación en mente, aún no se han concretado ventas, aunque parece haber interés por parte de varios países.
Las opciones para posibles compradores son limitadas, ya que solo tres países han desarrollado cazas de quinta generación: Estados Unidos, Rusia y China. Es poco probable que Estados Unidos adquiera el Su-57, mientras que China ya cuenta con el Chengdu J-20 Mighty Dragon, un caza de quinta generación influenciado por el F-35 estadounidense. Además, China recientemente presentó su prototipo de caza de sexta generación, el Emperador Blanco.
Opciones limitadas de compra para el caza ruso Su-57
Históricamente, China ha dependido en gran medida de las importaciones rusas para satisfacer sus necesidades tecnológicas en el ámbito aeroespacial. No obstante, en la actualidad, el país ha incrementado su capacidad de producción local, lo que ha reducido la necesidad de adquirir cazas extranjeros. En varios aspectos, el J-20 chino podría superar al Su-57, lo que hace que una compra por parte de China sea menos probable.
En términos de relaciones geopolíticas, las transacciones entre Rusia y China tienen bases sólidas, especialmente después de las recientes declaraciones de Sergei Shoigu en el Salón Aeronáutico de Zhuhai. El ministro de Defensa ruso subrayó la importancia de que ambos países se mantengan firmes ante la política de “doble contención” de Estados Unidos y sus aliados. A pesar de esto, no parece probable que China sea el comprador en esta ocasión.
Posibles compradores: Argelia, Irán o India
Los países más probablemente interesados en la compra del Su-57 son aquellos con los que Rusia mantiene relaciones cercanas, como Argelia, Irán o India. Se ha informado que Argelia estuvo en conversaciones para adquirir el Su-57, lo que la convierte en uno de los candidatos más fuertes para ser el comprador de esta aeronave.