El Departamento de Defensa de EE. UU. adjudicó a Lockheed Martin un contrato para integrar el AGM-88G, un nuevo misil antirradiación, en los cazas F-35A/B/C. Este contrato marca un avance significativo en la capacidad de defensa aérea estadounidense.
El AGM-88G AARGM-ER: Un nuevo horizonte en misiles antirradiación
El AGM-88G AARGM-ER, una versión avanzada de los misiles AGM-88E y AGM-88F, se caracteriza por un alcance significativamente mayor. Este misil, que se destaca por su capacidad de impactar objetivos desde distancias más seguras, es un hito en la tecnología de misiles antirradiación.
Una característica distintiva del AGM-88G es su sistema de navegación avanzado. A diferencia de versiones anteriores que combinaban navegación inercial y GPS, este nuevo modelo incorpora un radar de ondas milimétricas (MMW) para mayor precisión en su fase terminal.
Además, el AGM-88G ha sido diseñado para operar eficazmente en entornos hostiles, gracias a su tecnología furtiva que reduce la detección por radar y sus contramedidas electrónicas (ECCM) para contrarrestar interferencias.
Capacidades mejoradas y limitaciones en la flota F-35
La ojiva del AGM-88G ha sido mejorada sustancialmente en comparación con sus predecesores, haciéndola más letal y efectiva contra una variedad más amplia de blancos, incluyendo estructuras fortificadas y sistemas avanzados de defensa antiaérea.
Desarrollado durante casi siete años y presentado oficialmente en 2016, el AGM-88G destaca por su sección de control rediseñada y un motor cohete ampliado de 290 mm. A pesar de que los modelos F-35A y F-35C pueden equipar este misil, el F-35B, debido a limitaciones de espacio, no puede incorporarlo en su arsenal.
Este misil incorpora la ojiva y sistemas de guiado del AARGM en un fuselaje rediseñado, con aletas aerodinámicas y colas de baja resistencia. Su sistema de propulsión mejorado incrementa significativamente la velocidad y duplica el alcance del misil. El AGM-88G pesa 467 kg y mide 4,06 m de longitud, siendo ligeramente más corto que sus antecesores.
Expansión operativa del AGM-88G y su linaje histórico
La Marina de los Estados Unidos ha ampliado el uso operativo del AGM-88G, considerando su lanzamiento desde plataformas terrestres y aeronaves como el P-8 Poseidon. Esta expansión se concretó con la adquisición de 150 unidades del AGM-88G AARGM-ER en octubre de 2023.
Es crucial reconocer el linaje del misil HARM, cuyo desarrollo se remonta a los años ochenta. A pesar de las mejoras constantes, culminando en el AGM-88G, este linaje responde a la necesidad de adaptación a las realidades cambiantes del campo de batalla.
Un caso destacado de su uso fue durante la Operación Allied Force, donde la OTAN desplegó 743 misiles HARM. A pesar de este esfuerzo, la efectividad fue limitada, destacando la necesidad de mejoras continuas en tecnología de misiles como el AGM-88G.
La integración del misil antirradiación AGM-88G AARGM-ER al caza F-35 marca un avance en la defensa aérea de EE. UU. Este misil, con un alcance mayor y tecnologías avanzadas, mejora la efectividad del F-35 en entornos hostiles, ofreciendo mayor precisión y resistencia a contramedidas electrónicas.
El AGM-88G AARGM-ER sobresale por su alcance extendido, sistema de navegación avanzado con radar de ondas milimétricas para mayor precisión, y tecnología furtiva para reducir la detección por radar. Además, posee contramedidas electrónicas mejoradas y una ojiva más letal, efectiva contra una gama más amplia de objetivos.
Los cazas F-35A y F-35C pueden equipar el AGM-88G, mejorando sustancialmente sus capacidades ofensivas. Sin embargo, el F-35B, por limitaciones de espacio, no puede incorporarlo en su arsenal. Este misil amplía significativamente la efectividad de los F-35 en misiones de ataque a objetivos de defensa antiaérea.
El AGM-88G tiene un peso de 467 kg y mide 4,06 m de longitud, siendo ligeramente más corto que modelos anteriores. Se destaca por una sección de control rediseñada, un motor cohete ampliado y aletas aerodinámicas. Su sistema de propulsión mejorado incrementa la velocidad y duplica el alcance del misil.
El AGM-88G es parte del linaje del misil HARM, desarrollado desde los años ochenta, y representa una adaptación continua a las realidades cambiantes del campo de batalla. Su uso histórico incluye la Operación Allied Force, donde se evidenció la necesidad de mejoras tecnológicas, culminando en el desarrollo del AGM-88G.