Tanto Rusia como Ucrania han sufrido potentes embestidas militares en sus territorios clave. Se informa sobre daños a activos cruciales, incluyendo aviones de combate y sistemas estratégicos de defensa, conforme la tensión aumenta en la región.
Rusia: Ataques estratégicos y preocupación en la cúpula de mando
De acuerdo con el Ministerio de Defensa del Reino Unido, zonas esenciales en Rusia han experimentado consecutivas detonaciones. Sitios como Crimea, Krasnodar Krai y la región de Moscú han sido impactados.
La base aérea de Chkalovsky, cercana a Moscú, es de particular interés. Esta instalación alberga no solo aviones militares, sino también transporte de alta prioridad para los dignatarios rusos.
Informes adicionales sugieren que el avión especial COOT (Il-20) ha sufrido daños. Esta aeronave es crucial para misiones de recopilación de inteligencia electrónica, aunque su variante exacta aún está por determinarse.
Respuestas de Rusia tras incidentes en Crimea
En represalia a los sucesos recientes, Rusia ha llevado a cabo ataques de largo alcance sobre suelo ucraniano en múltiples ocasiones durante la última semana. Esto probablemente se debe a los acontecimientos en su propio territorio y en Crimea.
Según el Ministerio de Defensa del Reino Unido, con una situación terrestre que no avanza significativamente, ambas naciones buscan adquirir ventajas estratégicas alcanzando objetivos en profundidad dentro de los territorios rivales.
Asalto misilístico: La infraestructura energética de Ucrania
El día 21 de septiembre, Rusia intensificó su ofensiva lanzando un total de 43 misiles del tipo Kh-101/Kh-555/Kh-55 contra Ucrania. Aunque gran parte de estos proyectiles fueron neutralizados por defensas antiaéreas, el daño fue evidente.
Por primera vez en seis años, las infraestructuras energéticas de las zonas oeste y central de Ucrania han sido afectadas. No obstante, según la compañía Ukrenergo, todavía es prematuro asegurar que esto marca el inicio de una nueva campaña contra infraestructuras civiles.