Israel cree que Estados Unidos permitirá la venta del sistema de defensa antimisiles Arrow-3 a Alemania, declaró el martes el ministro saliente de Defensa, Benny Gantz.
“Hemos hablado con ellos para que lo permitan, el proceso está en marcha y tengo esperanzas de que se lleve a cabo”, declaró Gantz en declaraciones a Ynet News.
También el lunes, el Director General saliente del Ministerio de Defensa de Israel, General de División (retirado) Amir Eshel, se reunió con el Secretario de Estado alemán del Ministerio Federal de Defensa, Benedikt Zimmer, para el diálogo estratégico bilateral anual.
En la reunión participaron altos funcionarios de la Oficina de Política y Política Militar y de la DDR&D del Ministerio de Defensa de Israel y sus homólogos alemanes de la Dirección Política del Ministerio de Defensa, la Oficina de Cooperación Estratégica en Materia de Armamento, la Oficina del Secretario de Estado y la Oficina de Oriente Medio.
Según un comunicado emitido por el Ministerio de Defensa, los funcionarios discutieron cuestiones estratégicas globales y regionales como “la creciente amenaza iraní y el comportamiento maligno de Irán, las ramificaciones globales de la guerra entre Rusia y Ucrania, la cooperación bilateral en materia de defensa, el interés conjunto por reforzar la estabilidad regional, la ampliación de los procesos de investigación y desarrollo, y otras cuestiones a la luz de los acontecimientos en la región y en todo el mundo”.
También debatieron los acontecimientos relativos a la propuesta de venta del Arrow-3 a Berlín.
Mientras Alemania intenta desempeñar un papel más importante en el liderazgo militar de Europa, Berlín se retractó el lunes de la promesa que hizo tras la invasión rusa de Ucrania de aumentar el gasto en defensa hasta al menos el 2% de su PIB.
Según Politico, el portavoz jefe, Steffen Hebestreit, declaró a los periodistas que el objetivo del 2% no sólo se incumpliría este año, sino probablemente también el próximo, y que su “expectativa prudente” era que alcanzaría el objetivo en 2025.
Tras la invasión rusa, el Partido Socialdemócrata del Canciller alemán Olaf Scholz dijo que crearía un fondo especial de 100.000 millones de euros (108.000 millones de dólares) para modernizar rápidamente sus fuerzas armadas. Sin embargo, el SDP se ha enfrentado a duras críticas por la lentitud del despliegue del gasto en defensa.
Alemania confía en el acuerdo
No obstante, Alemania espera firmar un acuerdo para adquirir el sistema israelí de defensa antimisiles Arrow-3 y tenerlo operativo en 2025.
Según una fuente, si Rusia no hubiera invadido Ucrania el pasado mes de febrero habría sido mucho más difícil convencer a los legisladores para que compraran el Arrow-3. El acuerdo costaría unos 3.000 millones de euros, lo que lo convertiría en el mayor acuerdo de defensa de la historia de Israel.
El jefe de las Fuerzas Aéreas alemanas, el teniente general Ingo Gerhartz, estuvo en Israel en noviembre y visitó Israel Aerospace Industries, que fabrica el sistema, así como a altos cargos de las FDI y las Fuerzas Aéreas de Israel.
Berlín está presionando para adquirir el sistema, ya que no dispone de ningún sistema de defensa antimisiles capaz de interceptar misiles en el rango exoatmosférico de 15.000 metros, como es capaz de hacer el Arrow-3, lo que lo convierte en el sistema más relevante para las amenazas a las que se enfrenta la nación europea. Alemania espera adquirir al menos tres interceptores.
El canciller alemán Olaf Scholz hizo una petición inicial del sistema cuando se reunió con el entonces primer ministro Naftali Bennett en marzo. Y aunque Israel aprobó la venta, según una fuente, el retraso en la exportación se debe a la falta de aprobación por parte de Estados Unidos.
El Arrow-3, uno de los sistemas de defensa aérea más avanzados de Israel, es capaz de interceptar misiles balísticos a altitudes superiores a 100 km. y con un alcance declarado de hasta 2.400 km. El sistema, desarrollado por Israel Aerospace Industries, incluye componentes desarrollados en Estados Unidos, que ha invertido miles de millones en él.
Washington exige que al menos el 50% de los misiles interceptores vendidos se construyan localmente. En un intento de que Washington dé luz verde a la venta, el ministro de Defensa, Benny Gantz, ha hablado de la propuesta con su homólogo estadounidense, Lloyd Austin, así como con su homóloga alemana, Christine Lambrecht, en varias ocasiones.
Se espera que la adquisición del sistema forme parte del desarrollo europeo de un programa conjunto de defensa antiaérea denominado European Sky Shield Initiative, en el que participarán 14 países miembros de la OTAN.
En octubre se firmó en Bruselas una Carta de Intenciones por la que se iniciaba el desarrollo de Sky Shield, liderado por Berlín y cuyo objetivo es crear un sistema europeo de defensa antiaérea mediante la adquisición común de equipos de defensa antiaérea y misiles por parte de las naciones europeas.
El sistema rechazaría las amenazas a corta distancia, como los drones, y las de medio y largo alcance, como los misiles balísticos y de crucero, que podrían ir armados con armas nucleares.