Japón continúa trabajando en la creación de un caza sigiloso de quinta generación, como se pudo observar en las imágenes que se emiteron en la televisión nacional.
Las imágenes publicadas el 26 de marzo muestran que el equipo dirigido por Mitsubishi Electronics procedió a probar su radar activo de matriz escaneada electrónicamente (AESA) basado en el caza de combate Mitsubishi F-2. Según varios informes de los medios de comunicación, el nuevo radar AESA japonés, es similar al AN/APG-81 de Estados Unidos, que se instala en el caza de combate Lockheed Martin F-35 Lightning II.
También se exhibió por primera vez las imágenes del prototipo de prueba de un turborreactor de bajo bypass (en algunas fuentes llamado XF9-1) equipado con dispositivos de poscombustión, desarrollado por IHI Corporation como parte de un programa de planta de energía para un caza F-3 avanzado. El nuevo motor tiene aproximadamente 4.8 metros de longitud, aproximadamente 1 metro de diámetro y más de 15 toneladas de empuje con posquemador, y más de 11 toneladas de empuje intermedio.
Los desarrolladores dijeron que el motor del nuevo caza básicamente ha cumplido con los requisitos de rendimiento del diseño. Con la adopción de la tecnología de materiales de Japón, el prototipo central del motor garantiza un funcionamiento confiable a una temperatura de 1800 grados frente a la turbina, que ha alcanzado el nivel de la cuarta generación de motores turborreactores aéreos de gran tamaño.
De acuerdo con la información actual, Japón inició el programa de desarrollo del caza furtivo nacional en respuesta a la negativa de los Estados Unidos a vender a Japón el Lockheed-Martin F-22 Raptor en 2007. Los medios japoneses también informaron que la compra de los nuevos F- 35 era una solución provisional hasta que Tokio pueda desarrollar y producir su propio caza de quinta generación.
El mes pasado, el Ministerio de Defensa (MoD) de Japón confirmó a Jane sus planes de seguir un programa «liderado por Japón» para desarrollar un caza de combate de próxima generación que reemplazará a su plataforma de combate multirrol Mitsubishi F-2 en la década de 2030.