El retiro de 39 A-10 Warthog al cementerio de aviones en Arizona marca un paso clave en la eliminación progresiva de esta flota icónica.
La Fuerza Aérea acelera la retirada de los A-10 Warthog
Un total de 39 A-10 Warthog fueron enviados al cementerio de aviones de la base Davis-Monthan en Arizona durante 2024, según datos del 309th Aerospace Maintenance and Regeneration Group. Esta cifra representa un incremento significativo respecto a los 17 aviones enviados en 2023. Cabe la posibilidad de que el número sea mayor, ya que no se cuenta con información completa de los últimos meses del año.
En paralelo, la Fuerza Aérea ha confirmado que en las próximas semanas retirará los 24 A-10 restantes que actualmente operan en Corea del Sur. Este movimiento es parte del plan de eliminar progresivamente la flota para sustituirla por aeronaves más modernas, como el F-35A Lightning II.
La transición hacia nuevas tecnologías ha estado marcada por controversias. Durante años, miembros del Congreso bloquearon los retiros de los A-10 debido a preocupaciones sobre la capacidad de las aeronaves más recientes, como los F-35, para cubrir el rol crucial de apoyo aéreo cercano. Sin embargo, estas restricciones han disminuido, permitiendo que la Fuerza Aérea avance con los retiros.
Cifras clave sobre la flota de A-10 Warthog
- En 2024, se enviaron 39 A-10 al cementerio de aviones en Arizona, casi el 20% del total operativo restante.
- Actualmente hay alrededor de 50 A-10A y 107 A-10C almacenados, la mayoría en estado no operativo.
- La Fuerza Aérea busca reducir su flota a 96 unidades operativas para 2025.
- El inventario global de A-10 en servicio disminuyó de 270 en 2024 a 234 en 2025.
El debate sobre el reemplazo del A-10 con el F-35A
El F-35A Lightning II se posiciona como el reemplazo del A-10 Warthog, aunque enfrenta críticas debido a su desempeño en misiones de apoyo aéreo cercano. Mientras el A-10 está equipado con un cañón GAU-8/A Avenger con capacidad para 1,174 proyectiles, el F-35A solo puede cargar 180 proyectiles en su cañón GAU-22/A, lo que supone una limitación significativa.
Además, el desarrollo del sistema de armas del F-35A ha presentado problemas técnicos, especialmente con su cañón, que recién comenzó a funcionar de manera consistente en 2024. Aunque las misiones de ataque aéreo son menos frecuentes, persisten dudas sobre la capacidad del F-35 para igualar el rendimiento del A-10 en situaciones de combate cercano.
En contraste, el A-10 continúa demostrando su efectividad. En diciembre de 2024, unidades de este modelo participaron en misiones de combate en Oriente Medio, destacándose por su capacidad para emplear armas de alta precisión como su icónico cañón automático.
Reducción de la flota y proyecciones para 2030
El plan de la Fuerza Aérea establece la retirada total de los A-10 para el año 2030, sujeto a la aprobación del Congreso. En el año fiscal 2025, la Fuerza Aérea solicitó el retiro de 56 Warthogs, aunque el Congreso probablemente reducirá esta cifra. Actualmente, se prevé que la flota operativa se reduzca de 135 a 96 unidades.
A pesar de estas reducciones, el A-10 Warthog sigue siendo una aeronave operativa en la Fuerza Aérea de los EE. UU., con 218 unidades reportadas en servicio activo a principios del año fiscal 2024. Sin embargo, el envío de 39 unidades al cementerio de aviones en 2024 genera dudas sobre cuántas de estas unidades permanecen activas actualmente.
La eliminación gradual del A-10 marca el fin de una era para esta aeronave icónica, cuyo legado incluye décadas de servicio en apoyo aéreo cercano y operaciones de combate en múltiples escenarios alrededor del mundo.