El Vicesecretario de Defensa de EE. UU., William LaPlante, calificó la transición del F-35 a la producción a escala completa de hito significativo para el programa, justo un día después de que el Ejército del Aire anunciara una reducción de sus adquisiciones previstas para 2025.
Este avance fue anunciado formalmente el martes por el Pentágono, indicando que LaPlante dio luz verde al Hito C / Producción a Escala Completa del F-35 mediante la firma de un Memorando de Decisión de Adquisición tras concluir una sesión con la Junta de Adquisiciones de Defensa (DAB).
Para avanzar hacia la producción a gran escala, es imprescindible controlar rigurosamente el proceso de fabricación del avión, garantizar su rendimiento y fiabilidad, y establecer un sólido sistema de mantenimiento y apoyo, según ha señalado el Departamento de Defensa (DoD).
Progresos significativos para el F-35, aunque con retrasos
El comunicado del DoD subraya que el F-35 ha cumplido satisfactoriamente los criterios necesarios, superando un análisis integrado de las pruebas operativas iniciales y las evaluaciones con fuego real, cumpliendo los requisitos de desarrollo y demostración del sistema, respetando la documentación reglamentaria y esbozando una estrategia para la futura producción y las directrices del programa de adquisición.
Sin embargo, esta aprobación llega tarde, cuatro años más tarde, de lo inicialmente previsto por el DoD para la plena producción del F-35. Este hito se produce tras la finalización de las pruebas esenciales del Entorno de Simulación Conjunta en septiembre de 2023.
Estas rigurosas pruebas expusieron a las variantes del F-35 diseñadas para el Ejército del Aire, la Infantería de Marina y la Armada a una amplia gama de escenarios operativos simulados, desde defensa antiaérea y contra misiles de crucero hasta misiones especializadas de supresión de defensas aéreas enemigas (SEAD).
El Teniente General Mike Schmidt, director del programa F-35 en la Oficina del Programa Conjunto (JPO), celebró las importantes mejoras implementadas en este programa multinacional durante la última década, destacando el enfoque futuro en el desarrollo del F-35 más allá de los retos pasados.
La historia del F-35 es extensa; su desarrollo se remonta a la competición entre el Lockheed Martin X-35 y el Boeing X-32 en 2001 para el programa Joint Strike Fighter, surgiendo el F-35 de este proceso en 2002.
El avión realizó su primer vuelo en 2006, dando paso a una nueva era con su entrada en servicio para la Infantería de Marina (F-35B) en 2015, el Ejército del Aire (F-35A) en 2016 y la Armada (F-35C) en 2019, tras comenzar su producción preliminar en 2004. Así pues, el Lightning II ha tardado dos décadas en alcanzar la plena capacidad de producción.
Reducción de las adquisiciones del F-35 tras aprobación de plena producción
Justo un día antes de que se anunciara este importante logro, las Fuerzas Aéreas estadounidenses revelaron que, debido a un presupuesto provisional de 217.500 millones de dólares para el año fiscal 2025, tienen previsto adquirir seis F-35A menos de los previstos inicialmente, reduciendo su orden de compra de 47 a 42 aviones.
Este anuncio atenúa en parte el impacto de la declaración de LaPlante, quien argumentó que la decisión “demuestra a los servicios, a los socios del Programa Cooperativo del F-35 y a los clientes de Ventas Militares Extranjeras la estabilidad y agilidad del F-35…”.
La subsecretaria de Gestión Financiera e Interventora del Ejército del Aire, Kristyn Jones, atribuyó la reducción de las adquisiciones tanto a las limitaciones presupuestarias como a los retrasos en la Actualización Tecnológica 3 (TR-3) del F-35.
Según Jones, estos retrasos de Lockheed Martin han llevado al Pentágono a paralizar la recepción de nuevos F-35 a partir de julio de 2023, tal y como informó Defense News. “Queremos aviones con las capacidades prometidas en el TR-3 [y] el Bloque 4; los retrasos nos han llevado a minimizar el impacto reduciendo las adquisiciones…”.
Se prevé que el volumen de adquisiciones del F-35 se normalice en 48 unidades anuales para el año fiscal 2029, aunque el futuro podría deparar cambios significativos. He planteado preguntas al JPO del F-35 sobre la coherencia de aprobar picos de producción al tiempo que se reduce la adquisición de estos cazas.
Preguntas pendientes ante la reducción de las adquisiciones del F-35
Las preguntas planteadas van desde si el gobierno aceptará la acumulación de F-35 pendientes de entrega antes del verano, hasta si el JPO percibe la ironía de aumentar la producción en un momento en que la USAF está disminuyendo sus compras. Hasta el momento, no se han recibido respuestas de los JPO. En términos prácticos, la aprobación para aumentar la producción del F-35 parece tener un impacto limitado en su línea de producción.
Como he mencionado antes, Lockheed Martin ya opera a una capacidad de 150 aviones al año. Se han entregado más de 990 F-35 a las Fuerzas Aéreas, la Armada y el Cuerpo de Marines estadounidenses, así como a aliados internacionales y clientes de ventas militares extranjeras, que sin duda notan la menor demanda estadounidense de este caza recién autorizado para la producción en serie.