El SR-72, sucesor del SR-71, busca capacidades hipersónicas para misiones de reconocimiento y ataque a Mach 6 en entornos altamente defendidos.
Lockheed Martin presentó el SR-72 como sucesor hipersónico del SR-71
Durante más de diez años, el desarrollo del SR-72 ha generado debate en sectores de defensa y aviación. Este nuevo modelo pretende reemplazar al SR-71 Blackbird, superando sus capacidades al alcanzar velocidades mayores a Mach 6. La empresa Lockheed Martin, a través de su división Skunk Works, lidera el proyecto, anunciado en 2013, que combina avances en propulsión y diseño hipersónico. Aunque el programa ha transitado entre anuncios y confidencialidad, aún se desconoce si ya se ha entregado una unidad a la Fuerza Aérea estadounidense.
Diseñado durante la Guerra Fría, el SR-71 fue un avión clave para misiones de reconocimiento estratégico. Alcanzaba los 85,000 pies de altitud y velocidades de Mach 3.2, lo que le permitía evadir amenazas. Pese a más de 4,000 intentos de derribo, nunca fue alcanzado. Su retiro en 1998 dejó un vacío en ISR que satélites y drones no han logrado cubrir completamente por sus limitaciones operativas.
La presentación del SR-72 surgió como respuesta a esas carencias. Lockheed Martin reveló que el avión, de tamaño comparable al SR-71, incluiría un sistema de propulsión TBCC (ciclo combinado de turbinas), desarrollado junto con Aerojet Rocketdyne. Este sistema permite alternar entre un motor de turbina para velocidades subsónicas y un scramjet para alcanzar velocidades hipersónicas, resolviendo una de las principales dificultades técnicas del proyecto.
El plan inicial contemplaba un demostrador a escala en 2018 y un vehículo de investigación de vuelo (FRV) para 2023. Según Lockheed Martin, el SR-72 estaría listo hacia 2030. No obstante, en diciembre de 2013, la Fuerza Aérea decidió no financiar el proyecto, enfocando recursos en el RQ-180 de Northrop Grumman, un dron furtivo con menores costos para entornos disputados.
El desarrollo continúa sin apoyo financiero directo de la Fuerza Aérea
A pesar de la negativa inicial, Lockheed Martin mantuvo el proyecto en marcha de manera reservada. En 2014, la NASA adjudicó un contrato para investigar la viabilidad del sistema TBCC. Ese mismo año, Aerojet Rocketdyne recibió 1.1 millones de dólares para estudiar la transición entre modos de propulsión, lo que indica esfuerzos por superar obstáculos clave.
Rob Weiss, vicepresidente ejecutivo de Skunk Works en 2017, aseguró que el motor de ciclo combinado estaba listo para ser integrado en un prototipo. Estas declaraciones confirmaron avances relevantes en el desarrollo de tecnología hipersónica, pese a la falta de actualizaciones oficiales.
Desde 2018, el programa SR-72 se ha manejado con mayor secretismo. El anuncio de nuevas armas hipersónicas por parte de Rusia provocó una reducción significativa de la información pública disponible. Sin embargo, nuevos indicios como inversiones y declaraciones no oficiales han mantenido el interés en el proyecto.
En 2021, Lockheed Martin inauguró en Palmdale, California, la instalación Building 648, diseñada para fabricar estructuras compuestas mediante impresión 3D y tecnologías robóticas. Este sitio, dotado de inteligencia artificial, estaría destinado a la producción del SR-72, lo que indicaría una fase avanzada del programa.
Datos clave sobre el SR-72 y su desarrollo tecnológico
- Velocidad proyectada: Mach 6, el doble que el SR-71 Blackbird.
- Propulsión: sistema TBCC con turbina y scramjet desarrollado por Aerojet Rocketdyne.
- Posible entrada en servicio: estimada hacia 2030.
- Instalaciones avanzadas: Building 648 en Palmdale, equipada con robótica e IA.
- Contrato de NASA y fondos para investigación: 1.1 millones de dólares en 2014.
- Diseño pensado para entornos A2/AD, con evasión de defensas aéreas modernas.
Lockheed reporta pérdidas ligadas a un programa clasificado
En 2024, Lockheed Martin reportó una pérdida de 45 millones de dólares atribuida a un proyecto clasificado, sumando 335 millones desde 2022. Estos datos refuerzan la hipótesis de una inversión significativa en el desarrollo del SR-72, que implicaría riesgos financieros considerables.
La empresa espera que el Departamento de Defensa respalde el proyecto más adelante. Esta estrategia ya se ha aplicado antes en otros desarrollos de Skunk Works, como el dron D-21. Según analistas, la magnitud de las inversiones sugiere que el programa permanece activo y en una fase avanzada.
En 2023, Vago Muradian, editor de Defense & Aerospace Report, declaró que Skunk Works había entregado un avión de reconocimiento avanzado, posiblemente el SR-72. Aunque no especificó detalles, señaló que persistían desafíos técnicos que forzaban una redefinición del programa.
El SR-72 está concebido para operar en zonas de acceso denegado, donde los sistemas de defensa restringen a aeronaves furtivas o drones subsónicos. Su ventaja se basa en la combinación de velocidad, altitud y tecnología hipersónica, que permitiría sobrevolar continentes en menos de una hora.
El SR-72 enfrenta desafíos técnicos y competencia presupuestaria
El desarrollo del SR-72 presenta obstáculos complejos. Integrar un diseño aerodinámico con el sistema de propulsión TBCC implica retos significativos, especialmente en la transición entre los modos de propulsión. Además, los costos reflejan la dificultad de implementar esta tecnología a escala real.
Las pruebas a escala son necesarias para validar la viabilidad del diseño. Mientras tanto, la ausencia de financiación directa por parte de la Fuerza Aérea evidencia una competencia interna por recursos, con programas como el bombardero B-21 y el NGAD también en desarrollo.
El interés público en el SR-72 se intensificó cuando fue vinculado al ficticio avión Darkstar de la película Top Gun: Maverick. Aunque colaboró en el diseño conceptual del modelo para el filme, Lockheed Martin aclaró que Darkstar no corresponde a un proyecto real y que el SR-71 sigue siendo el avión más rápido oficialmente reconocido.
En 2017 se reportó la observación de un prototipo a escala en las instalaciones de Skunk Works, aunque no se ha confirmado si realizó vuelos operativos. Esta información, junto con las recientes inversiones, apunta a que el programa SR-72 continúa su desarrollo en secreto.