Malasia contempla la adquisición del caza ruso Su-57, pese a críticas, para su Fuerza Aérea en 2035.
Evaluación del Su-57 y otras opciones para la Real Fuerza Aérea de Malasia
El interés de Malasia en el Su-57 ha surgido a pesar de las críticas recibidas por este avión. Según el medio Twentytwo13, se prevé que el primer Su-57 Felon sea entregado al finalizar el 14º Plan de Malasia, con la compra de un escuadrón y la opción de adquirir un segundo. Además del Su-57, Malasia ha mostrado interés en otros aviones de combate como los F/A-18C/D Hornets, aunque pretende obtenerlos de Kuwait. También se planea modernizar los 18 Sukhoi Su-30MKM existentes al estándar Super Flanker.
Entre los principales competidores del Su-57 se encuentra el KF-21 Boramae de Corea del Sur, ambos considerados modernos y operativos. En una fase inicial, Malasia evaluó opciones como el Eurofighter Typhoon, el Dassault Rafale francés, el Saab JAS-39 Gripen sueco y el Boeing F/A-18E/F Super Hornet estadounidense. Sin embargo, estos aviones pertenecen a la generación 4.5 y han estado en servicio alrededor de dos décadas, limitando su potencial de desarrollo futuro.
Rusia está equipando gradualmente sus escuadrones con el Su-57 Felon en una fase inicial de producción a bajo ritmo. Este avión de combate de última generación destaca por su capacidad de sigilo, supermaniobrabilidad y avanzada aviónica, diseñado tanto para combate aéreo como misiones de ataque.
Características técnicas y capacidades del Su-57 Felon
El Su-57 presenta unas dimensiones de aproximadamente 20 metros de largo, 14 metros de ancho y 4,5 metros de alto. Puede llevar una amplia variedad de armas y sensores mientras mantiene una baja detectabilidad en el radar. Equipado con dos motores Saturn AL-41F1, puede alcanzar velocidades de hasta Mach 2 y volar a velocidades supersónicas sin necesidad de postcombustión, lo que contribuye a un ahorro de combustible significativo.
El diseño alar del Su-57, que mezcla alas trapezoidales y en flecha, junto con dos motores espaciados entre sí, mejora la sustentación, reduce la resistencia y aumenta la estabilidad y control del avión. Los estabilizadores móviles, tanto horizontales como verticales, proporcionan ventajas en maniobrabilidad y estabilidad durante el despegue, aterrizaje y vuelo lento.
El avión está compuesto mayormente de aleaciones, con un 40,5-44,5% de aluminio y un 18,6% de titanio. Además, utiliza una significativa cantidad de materiales compuestos, que constituyen entre el 22 y el 26% de su peso y alrededor del 70% de su superficie exterior, lo que contribuye a su diseño furtivo.
Sistema de radar N036 Byelka y capacidades de guerra electrónica
Como caza furtivo de quinta generación, el Su-57 está equipado con un sistema de radar N036 Byelka que emplea tecnología AESA. Este radar avanzado es capaz de dirigir electrónicamente su haz, permitiendo detectar y rastrear objetivos con mayor rapidez y eficiencia. Sobresale en la detección y seguimiento simultáneo de múltiples objetivos y posee avanzadas funciones de guerra electrónica.
El radar N036 Byelka permite al Su-57 bloquear radares y comunicaciones enemigas, manteniéndose seguro en zonas peligrosas. Además, puede recopilar información de señales enemigas para labores de inteligencia electrónica. Una característica destacada de este radar es su baja probabilidad de interceptación (LPI), dificultando que los enemigos detecten sus señales.
Esta capacidad de sigilo complementa perfectamente el diseño furtivo del avión, incrementando su efectividad en combate y su capacidad de supervivencia en entornos hostiles.
Armamento y capacidades de ataque del Su-57
El Su-57 lleva como una de sus principales armas el misil R-77, también conocido como AA-12 Adder, y puede portar el misil R-73 (AA-11 Archer). Para combates a largo alcance, utiliza el misil R-37M (AA-13 Arrow). En cuanto a armamento aire-tierra, el Su-57 está equipado con el misil Kh-38 y el Kh-59MK2, un misil de crucero furtivo de largo alcance diseñado para alcanzar objetivos de alto valor con precisión.
Este misil es ideal para misiones de ataque profundo gracias a su baja visibilidad en radar. Además, el Su-57 puede desplegar bombas guiadas como las KAB-250 y KAB-500, las cuales utilizan guía satelital y láser para alcanzar objetivos terrestres con precisión. Esto lo hace efectivo tanto para el apoyo aéreo cercano como para el bombardeo estratégico.
Finalmente, el Su-57 cuenta con un cañón automático GSh-30-1 de 30 mm, útil para el combate aéreo a corta distancia y para atacar objetivos terrestres, incrementando la versatilidad y letalidad del avión en diversas situaciones de combate.