Una misión de alto riesgo en el interior de Corea del Norte, una operación fallida y la muerte de un pequeño grupo de pescadores. Esta es la afirmación sensacional que publicó recientemente el New York Times, en la que informó que el Escuadrón Rojo del SEAL Team 6 fue enviado a la costa norcoreana en 2019 para instalar un dispositivo capaz de interceptar las comunicaciones de Kim Jong Un.
Según el relato del NYT, la Casa Blanca, sin información respecto a la inteligencia sobre Pyongyang antes de la cumbre Trump–Kim de 2019 en Hanói, autorizó la inserción de los SEAL desde un submarino de ataque estadounidense posicionado frente a la costa. Se lanzaron dos mini-submarinos, cada uno con cuatro operadores. Una fuerza de reserva permaneció en la zona, e incluyó una unidad descrita como un helicóptero sigiloso, lista para intervenir en caso de emergencia.
La incursión habría salido mal casi de inmediato. Un mini-submarino desembarcó fuera de la posición prevista. Apareció un barco pesquero norcoreano, cuya tripulación iluminó las aguas oscuras con linternas. Porque temían ser detectados, los SEAL abrieron fuego y causaron la muerte de dos o tres pescadores. Posteriormente, hundieron el mini-submarino antes de que abortaran la misión y regresaran al submarino principal. Satélites de espionaje estadounidenses detectaron posteriormente un aumento de la actividad de las patrulleras norcoreanas en la zona, aunque Pyongyang nunca reconoció ningún incidente.
Estado: no confirmado
Al momento en que se redacta este artículo, la historia no ha sido confirmada y resulta imposible verificarla. Algunos analistas incluso sostienen que la filtración podría ser deliberada, ya sea para desacreditar la administración Trump al poner de relieve una operación encubierta temeraria, o para engañar al público al hacerle creer que la incursión fracasó, cuando en realidad podría haber alcanzado sus objetivos.
El New York Times es ampliamente reconocido como un medio de comunicación de prestigio y ha recibido más premios Pulitzer que cualquier otra organización. No obstante, ha cometido errores periodísticos a lo largo de los años. Una búsqueda breve en línea evidencia algunas historias fabricadas por el reportero Jayson Blair, coberturas polémicas sobre el Holocausto o, más recientemente (2023), reportes incorrectos sobre el incidente en un hospital de Gaza. Estos episodios no afectan la reputación global del NYT como institución periodística. Sin embargo, como siempre, incluso las fuentes más autorizadas no deben considerarse confiables a priori, en línea con el concepto de “Zero Trust” al que se ha hecho referencia en varias ocasiones.
Asignación al SEAL Team 6 y el helicóptero sigiloso
Algunos observadores han recibido la historia del New York Times con fuerte escepticismo. Su argumento principal es que, de haberse producido realmente la operación, habría estado clasificada al nivel más alto. Revelar los detalles años después, que incluyen unidades, plataformas y fallos tácticos, parece menos un informe periodístico que un acto deliberado de sabotaje disfrazado de noticia.
La propia narrativa genera dudas. ¿Acaso DEVGRU (SEAL Team 6) habría sido asignado a una incursión anfibia de alto perfil en Corea del Norte, semanas antes de las conversaciones nucleares en Hanói?
La supuesta asignación de la misión al SEAL Team 6 también plantea interrogantes. Esta relación podría ser plausible o un indicio de manipulación narrativa. El artículo del NYT menciona específicamente que la misión fue asignada al Escuadrón Rojo de DEVGRU y destaca su anterior operación de alto perfil para eliminar a Osama bin Laden. Cabe señalar que los pocos detalles disponibles sobre DEVGRU indican que el Escuadrón Rojo es una unidad de asalto, mientras que las operaciones de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento, incluida la recolección de información clandestina, suelen asignarse al Escuadrón Negro.
Razonamiento similar se aplica al “helicóptero de ala rotatoria sigiloso” supuestamente desplegado para apoyar la misión. Si este dato fuera cierto, remitiría al único despliegue confirmado en el mundo real de un helicóptero sigiloso: el “Stealth Black Hawk” o “Silent Hawk” usado durante la incursión contra Osama bin Laden en 2011. Nuestras investigaciones previas sobre aeronaves de baja detectabilidad y operaciones especiales secretas hacen esta afirmación particularmente interesante. No obstante, debe tomarse con cautela: en el contexto de una misión clandestina tras las líneas enemigas, el uso de helicópteros diseñados para evadir radares resulta siempre coherente con la operación.
Desde la Operación Neptune’s Spear en Abbottabad en 2011, no es la primera vez que se afirma que una operación especial audaz involucró “helicópteros sigilosos”, aunque tales afirmaciones nunca hayan sido confirmadas oficialmente. Por ejemplo, se dijo que variantes mejoradas de los Black Hawk utilizados en 2011 fueron empleadas en 2014 para penetrar 200 millas en Siria y apoyar una misión de la Delta Force del Ejército estadounidense. Hasta ahora, no existen pruebas sobre el uso de dichos helicópteros.
Otro aspecto relevante, aplicable a la misma línea de razonamiento, es la muerte de los pescadores. Esto recuerda un episodio similar, rodeado de controversia, que algunas fuentes mencionaron durante la Operación Red Wings en Afganistán en 2005, posteriormente retratado en la película Lone Survivor. Un equipo SEAL de cuatro miembros fue descubierto por pastores locales poco después de su inserción durante una misión de reconocimiento. La película y algunas fuentes sostienen que los SEAL debatieron si matarlos o dejarlos libres, decisión que finalmente no se habría materializado, ya que los pastores fueron temporalmente retenidos y luego liberados.
Por todo lo anterior, resulta muy difícil separar hechos plausibles de ficción.
En resumen, demasiados aspectos de la historia permanecen, al menos, confusos: el área exacta del desembarco (posiblemente cerca de Wonsan, donde Kim posee una villa y un muelle para yates), el número de víctimas y las conclusiones del Pentágono sobre fallos de comunicación y errores de navegación.
La filtración, que surge justo después de la reciente aparición de Kim Jong Un en Pekín junto a Xi Jinping y Vladimir Putin, genera más preguntas.
¿Todavía existe el Stealth Black Hawk?
Independientemente de si la operación ocurrió tal como se describe, fue distorsionada con fines políticos o filtrada como parte de una campaña deliberada de desinformación, persiste un punto de interés: el secreto continuo del helicóptero sigiloso, expuesto por primera vez durante la incursión contra Osama bin Laden y aún mantenido en secreto casi 15 años después, posiblemente porque continúa en servicio y listo para desplegarse cuando sea necesario.
A lo largo de los años, se han hecho numerosas afirmaciones sobre Black Hawks altamente modificados, siempre sin evidencia nueva. Hasta 2025, la única prueba de la existencia de estos helicópteros más sigilosos para operaciones especiales proviene de fotos y videos del helicóptero siniestrado tras la incursión contra Osama bin Laden.
Muchas imágenes difundidas en línea fueron verificadas como meras maquetas del helicóptero sigiloso utilizadas en la película Zero Dark Thirty, que recreaba la incursión de 2011. Además, aunque las fotos de Abbottabad muestran la sección de la cola, no se conoce la apariencia del resto del helicóptero real.
Algunos reportes en línea mencionan que solo existían dos helicópteros Stealth Black Hawk en 2011 y que se construyeron más después de la operación. Otros informes afirman que los nuevos helicópteros son aún más avanzados y se consideran de segunda generación. Nuevamente, ambos aspectos resultan imposibles de verificar.
De forma similar, múltiples reportes aseguran conocer la base de estos helicópteros y mencionan Nellis AFB, Groom Lake o Tonopah Test Range Airport. Lo mismo ocurre con su operador, la mayoría de los informes indican que es el 160º Regimiento de Aviación de Operaciones Especiales del Ejército de Estados Unidos.
Tras casi 15 años, parece que uno de los mayores enigmas de la aviación en operaciones especiales permanecerá sin resolver. Clasificado al más alto nivel, es posible que este helicóptero siga en operación en secreto sin que se conozca siquiera su aspecto, lo que mantiene su condición de secreto y también impide su identificación en un mundo donde incluso una fotografía borrosa, compartida en línea, puede revelar programas secretos.