La Fuerza Aérea Noruega realiza vuelos con combustible de aviación sostenible, marcando un hito en sostenibilidad para los aviones F-35 de Lockheed Martin.
La Fuerza Aérea Noruega lidera el uso de SAF en aviones F-35
El 15 de enero de 2025, Lockheed Martin anunció que la Fuerza Aérea Noruega se convirtió en la primera en operar un avión F-35 con combustible de aviación sostenible (SAF). Este innovador paso busca reducir emisiones y aumentar la seguridad de suministro de combustible.
En una declaración traducida al inglés, el gobierno noruego informó que el F-35 realizó un vuelo exitoso utilizando una mezcla con un 40% de SAF. El ministro de Defensa de Noruega, Bjørn Arild Gram, destacó la importancia de esta iniciativa: “El uso de combustibles sostenibles ayuda a reducir las emisiones y puede reforzar nuestra seguridad de suministro. No se trata solo del clima, sino también del desarrollo tecnológico y la preparación”.
Esta innovación es especialmente relevante considerando que los aviones de combate noruegos generan alrededor de un tercio de las emisiones de CO₂ del sector de defensa. Noruega busca así cumplir sus objetivos climáticos y, al mismo tiempo, garantizar la preparación de sus fuerzas armadas.
Además, el desafío de abastecimiento global de SAF sigue siendo un tema crítico, ya que la producción actual es insuficiente para cubrir la demanda internacional. Para Noruega, producir este tipo de combustible localmente es una forma de disminuir la dependencia de las cadenas de suministro internacionales.
Características del combustible de aviación sostenible (SAF)
- El SAF está diseñado para imitar el combustible de aviación tradicional pero sin utilizar combustibles fósiles.
- Se elabora a partir de desechos, residuos y subproductos, reduciendo las emisiones de carbono.
- Garantiza el cumplimiento de los estrictos estándares de rendimiento y fiabilidad del F-35 tras un análisis técnico exhaustivo.
- Contribuye a la diversificación de la cadena de suministro y la reducción de vulnerabilidades logísticas.
Ventajas estratégicas y climáticas del SAF para Noruega
La capacidad de producir SAF localmente fortalece la seguridad energética de Noruega y reduce su dependencia de rutas de abastecimiento internacionales. Esto es clave, considerando la cercanía geográfica de Noruega con la Federación Rusa.
En términos climáticos, el uso de SAF representa un paso importante hacia la neutralidad de carbono en todos los sectores, incluyendo el militar. Según Andreas Bjelland Eriksen, ministro de Clima y Medio Ambiente: “Este programa demuestra lo importante que es participar en el desarrollo de tecnologías más sostenibles. Ahora las Fuerzas Armadas pueden ser parte de este avance”.
La experiencia exitosa de Noruega con el SAF podría servir como modelo para otras naciones que operan el F-35, demostrando que es posible combinar eficiencia militar con prácticas más sostenibles.
Además, el motor turbofán Pratt & Whitney F135, utilizado por todos los F-35, ha sido adaptado para garantizar un rendimiento óptimo con este tipo de combustible. Este motor ha registrado más de 940,000 horas de vuelo y está diseñado para soportar los más altos estándares de calidad.
El F-35: una plataforma tecnológica multifacética
El F-35 no solo es un avanzado avión de combate, sino también una plataforma de sensores con tecnología furtiva. Este modelo está disponible en tres variantes, pero todas utilizan el mismo motor F135 y cuentan con piezas producidas globalmente.
En 2024, Lockheed Martin entregó 110 nuevos F-35, alcanzando una producción acumulada de más de 1,100 unidades. Noruega, por su parte, opera 52 F-35A de los 3,579 encargados en todo el mundo, consolidándose como un socio estratégico dentro de la OTAN.
Además de su capacidad para operar con SAF, el F-35 ha demostrado flexibilidad en su despliegue, como lo evidencia su uso en bases de carreteras finlandesas durante ejercicios conjuntos con la OTAN.
Impacto global del uso de SAF en la flota F-35
La implementación de SAF en los F-35 noruegos respalda los objetivos del Departamento de Defensa de los EE. UU. en términos de diversificación energética. Según Chauncey McIntosh, vicepresidente del programa F-35 en Lockheed Martin: “La incorporación de nuevas fuentes de combustible contribuye a diversificar la cadena de suministro y mantener la excelencia operativa”.
El esfuerzo de Noruega en este ámbito refuerza su compromiso con la sostenibilidad y la preparación estratégica. Para Lockheed Martin, este avance también garantiza que el F-35 esté listo para liderar las misiones de dominio aéreo en las próximas décadas.
Con esta iniciativa, Noruega sienta un precedente en el uso de tecnologías más limpias en el sector militar, demostrando que es posible avanzar hacia un equilibrio entre seguridad nacional y sostenibilidad ambiental.