El Pentágono inspeccionará toda la flota V-22 tras un incidente en noviembre. Se busca identificar problemas en las cajas de cambios del rotor.
La revisión de la flota busca prevenir fallos en vuelo
Tras un incidente ocurrido en noviembre con un V-22 Osprey, el Pentágono ha emitido una orden para inspeccionar cada una de las aeronaves de este modelo. El Comando de Sistemas Aéreos Navales (NAVAIR), que supervisa la aeronavegabilidad del V-22, ha instruido verificar las horas de vuelo acumuladas en las cajas de cambios del rotor proporcional antes de que cualquier aeronave despegue nuevamente.
Para aquellos V-22 que no alcancen un umbral de horas específico, NAVAIR ha autorizado vuelos bajo restricciones adicionales y medidas de mitigación de riesgos. Según la información emitida, las nuevas directrices contarán con controles más estrictos y específicos para garantizar la seguridad durante las operaciones.
Esta medida surge tras la colaboración entre el Comando de Operaciones Especiales del Cuerpo de Marines, la Armada y la Fuerza Aérea de Estados Unidos, que en conjunto operan más de 400 aeronaves de este tipo. Cabe destacar que, entre todas las variantes, el Cuerpo de Marines posee la mayoría, con 348 aeronaves activas. Además, Japón cuenta con 14 unidades del modelo MV-22 operadas por su Fuerza Terrestre de Autodefensa.
Mientras se espera una actualización mecánica para las cajas de cambios del rotor proporcional (PRGB), las restricciones de vuelo y los procedimientos actualizados permanecerán en vigor. Estas medidas preventivas son resultado de fallos detectados en los PRGB, los cuales han provocado accidentes graves, incluido un caso fatal en 2023.
Datos clave sobre las inspecciones del V-22 Osprey
- La flota global de V-22 Osprey asciende a más de 400 unidades operadas por EE. UU. y Japón.
- Los modelos con menos horas de vuelo estarán sujetos a restricciones y medidas de mitigación.
- El problema radica en la debilidad metalúrgica de las cajas de cambios del rotor proporcional (PRGB).
- El fallo de un PRGB fue la causa de un accidente en Japón en 2023, que dejó ocho muertos.
- Los nuevos procedimientos de emergencia incluyen aterrizar inmediatamente tras cualquier alerta crítica en vuelo.
Impacto de los fallos detectados en los sistemas PRGB
Un problema relacionado con los PRGB ya había sido identificado como causa de un trágico accidente en 2023 frente a las costas de Japón. Ocho miembros de la Fuerza Aérea murieron cuando un CV-22 sufrió una falla en el motor generada por fragmentos metálicos provenientes de la caja de cambios. El evento fue conocido como el accidente del Gundam-22, nombre derivado del indicativo del vehículo.
En noviembre de este año, un fallo similar estuvo a punto de ocasionar un accidente en Nuevo México, cuando un CV-22 I activó una alerta de fragmento metálico en vuelo. Los procedimientos de emergencia actualizados permitieron a la tripulación realizar un aterrizaje seguro, evitando una tragedia.
Las nuevas directrices incluyen una regla que obliga a aterrizar lo antes posible tras una única alerta de fragmento y prohíben continuar el vuelo en caso de una segunda advertencia. Este cambio es más restrictivo que las normativas anteriores, que permitían múltiples alertas antes de activar procedimientos de emergencia.
Aunque la flota fue puesta en tierra a finales de 2023, los vuelos se reanudaron bajo estrictas condiciones en abril para los modelos del Cuerpo de Marines y en otoño para los CV-22 de la Fuerza Aérea. Las restricciones se mantendrán vigentes hasta que las transmisiones sean reemplazadas por versiones más resistentes.
El proceso de sustitución de transmisiones llevará años
Reemplazar las transmisiones de los V-22 Osprey con versiones mejoradas será un proceso prolongado que se extenderá por varios años. Según NAVAIR, los PRGB actuales presentan fallas en etapas tempranas de uso, pero aquellos que han superado un umbral crítico de horas de vuelo son considerados seguros.
No obstante, los detalles específicos sobre las horas umbral, la cantidad exacta de aeronaves afectadas y los controles adicionales no han sido revelados por NAVAIR, debido a razones de seguridad operacional.
El jefe de NAVAIR indicó en junio que las restricciones totales de vuelo no se levantarían antes de mediados de 2025. Por el momento, las misiones del Cuerpo de Marines se limitan a vuelos no combativos, mientras que las operaciones de combate con CV-22 se retomaron recientemente bajo estrictas condiciones de seguridad.
Entre las medidas vigentes, se encuentran limitaciones en el tiempo de vuelo permitido para alcanzar aeródromos alternativos y modificaciones en los procedimientos de emergencia. Estas disposiciones, aunque restrictivas, han demostrado su eficacia al prevenir incidentes más graves, como el registrado en Nuevo México.