La Fuerza Aérea de Rusia no está haciendo el trabajo sobre Ucrania. Los problemas de sus aviones de combate están bien documentados y son sorprendentes. Algunos informes muestran que los aviones de combate rusos están lidiando con problemas básicos de navegación. El cazabombardero Su-34 es un ejemplo. Fuentes militares británicas afirman que los pilotos del Su-34 están colocando burdamente receptores GPS civiles básicos en los mandos de la cabina. Además, el Su-34 está siendo derribado en racimos, y los ucranianos están llevando a cabo campañas de recaudación de fondos que venden piezas de los cazas destruidos. Se trata de acontecimientos humillantes para la Fuerza Aérea de Vladimir Putin. Los aviones que los rusos pensaron que dominarían los cielos han sido un fracaso.
Restos visibles
Los ucranianos que examinan los Su-34 destrozados están encontrando sistemas GPS de posventa “pegados a sus salpicaderos”, según el secretario de Defensa británico, Ben Wallace. En comentarios emitidos el 9 de mayo, Wallace dijo que los rusos están exhibiendo “la mala calidad de sus propios sistemas”.
En otro giro embarazoso, los ucranianos están celebrando los Su-34 destruidos de forma original. Un grupo ha reunido piezas de los cazas derribados, que la gente puede comprar en línea por 1.000 dólares. La recaudación se destina al ejército ucraniano. Puedes visitar este sitio para donar y recibir tu premio de los restos del Su-34. El recuerdo es un llavero de color azul que se considera un “trozo original de piel de avión” de un Su-34. Un voluntario dijo que la recaudación de fondos ha acumulado 30.000 dólares con este truco.
Hay muchas pruebas de Su-34 destrozados en Internet. Según las fotos de código abierto recogidas por el blog Oryx, se puede confirmar que al menos nueve Su-34 fueron derribados por las fuerzas ucranianas.
Se suponía que el Su-34 era un avión moderno
Antes de la guerra, el Su-34 era considerado uno de los aviones de guerra más valiosos de Rusia. Capaz de volar con cualquier tiempo y de noche, el Su-34 es un cazabombardero con una autonomía de 600 millas y una carga útil que le permite transportar 12 toneladas de munición. El Su-34 puede compararse con un F-15E Strike Eagle.
El Su-34 tiene un piloto y un copiloto sentados uno al lado del otro. El copiloto también maneja los sistemas de navegación y de armamento. Se trata de una cabina grande, y la tripulación puede incluso ponerse de pie en su interior y tumbarse en una zona de descanso completa con un aseo.
El avión bimotor del Su-34, de 50 millones de dólares, es una variante del Su-27. El Su-34 es conocido por lanzar municiones guiadas de precisión, pero David Axe, de Forbes, cree que las PGM se han agotado y que el Su-34 está lanzando bombas tontas desde bajas altitudes. Estas arriesgadas maniobras los exponen a las defensas aéreas ucranianas.
¿Qué está pasando con el Su-34?
El Su-34 es bastante moderno y los rusos lo compraron en racimos a partir de 2008. Estos aviones se consideraban innovadores. Podían bombardear a voluntad, pero tenían la velocidad y la agilidad necesarias para superar a los cazas enemigos y evitar los misiles tierra-aire. Los rusos deben estar sorprendidos de que el Su-34 esté teniendo tantos problemas sobre Ucrania.
No está claro por qué un caza que se suponía que iba a llevar a la fuerza aérea rusa a una nueva era necesitaría un GPS civil. El hecho de que el enemigo venda piezas de los Su-34 derribados añade un insulto a la herida. Este es otro ejemplo de la incapacidad de Rusia para llevar a cabo una guerra aérea moderna capaz de lograr el dominio del aire. Limitarse a volar hacia un objetivo y lanzar bombas tontas es una táctica simple que no desafía a la parte ucraniana. El Su-34 ha sido una flagrante decepción, ya que la fuerza aérea rusa sigue teniendo problemas.