El Proyecto Mayhem busca crear un avión no tripulado de Mach 10 para misiones de ataque e inteligencia, combinando scramCazas y tecnologías digitales avanzadas.
La USAF apuesta por un sistema hipersónico con múltiples capacidades
El Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea de Estados Unidos (AFRL) lidera el desarrollo del Proyecto Mayhem, un bombardero hipersónico no tripulado diseñado para alcanzar velocidades de hasta Mach 10. Con esta iniciativa, busca revolucionar las operaciones aéreas ofensivas y de inteligencia. El contrato, otorgado en diciembre de 2022, asigna 334 millones de dólares a Leidos, empresa que coordina con socios como Draper, Kratos y Calspan.
La meta del programa es diseñar un sistema aire-respirable reutilizable que integre misiones de inteligencia, vigilancia, reconocimiento (ISR) y ataque. Según The National Interest, el bombardero tendrá una velocidad de 7,000 mph, superando al SR-71 Blackbird, y ofrecerá una carga útil y un alcance cinco veces mayores que los del AGM-183A ARRW. El equipo emplea Ingeniería Basada en Modelos (MBE) para recrear las condiciones del vuelo hipersónico y optimizar el diseño.
Desde Draper, Frank Serna, director de Sistemas Estratégicos de la Fuerza Aérea, señaló en Popular Mechanics que el proyecto demanda avances en materiales resistentes al calor y en propulsión scramjet, fundamentales para mantener velocidades superiores a Mach 5. La fase inicial del contrato, valorada en 24 millones de dólares, concluyó en 2024 e incluyó revisiones clave como la Revisión de Requerimientos del Sistema (SRR) y la Revisión de Diseño Conceptual (CoDR).
La arquitectura del Mayhem incorpora motores scramjet, que permiten compresión y combustión de aire a velocidades supersónicas sin partes móviles. Esta tecnología posibilita vuelos prolongados por encima de Mach 5. Chris Combs, especialista de la Universidad de Texas en San Antonio, declaró que estas capacidades “revolucionarán la defensa y el transporte aéreo” al permitir mayor alcance y precisión.
Tecnologías clave: motores scramjet, materiales avanzados y 3D
En el núcleo del proyecto se encuentran los scramCazas (Supersonic Combustion Ramjet), que operan sin compresores internos y aprovechan el flujo de aire supersónico para generar empuje. Esta tecnología es esencial para sostener el vuelo a velocidades hipersónicas y representa uno de los mayores retos técnicos del Mayhem.
Durante el vuelo a Mach 10, las temperaturas por fricción superan los 3,000 °F, lo que obliga al uso de materiales con alta resistencia térmica. Jack O’Banion, citado por Military Embedded Systems, afirmó que la impresión 3D permite producir componentes complejos con sistemas de enfriamiento integrados, imprescindibles para garantizar la estabilidad estructural.
Características técnicas clave del bombardero Mayhem
- Velocidad máxima estimada: 7,000 mph (Mach 10)
- Tipo de propulsión: motores scramjet sin partes móviles
- Misiones combinadas: ataque de precisión e ISR
- Materiales avanzados: impresión 3D para componentes térmicamente resistentes
- Diseño digital: modelado de vuelo hipersónico con Ingeniería Basada en Modelos (MBE)
- Socios clave: Leidos, Draper, Calspan y Kratos
Draper contribuye con sistemas de navegación y guía, mientras Leidos lidera el diseño digital del aparato. Este enfoque permite simular condiciones extremas, mejorando la eficiencia del desarrollo y asegurando un desempeño confiable en escenarios operativos exigentes.
Uno de los retos técnicos del proyecto consiste en transicionar de vuelo hipersónico a aterrizaje controlado, lo que exige motores de propulsión combinada. Para superar esta barrera, el equipo trabaja en diseños híbridos que permitan un cambio eficiente entre los distintos modos de vuelo.
El Mayhem como plataforma estratégica de guerra aérea futura
La principal ventaja táctica del Mayhem reside en su capacidad para ejecutar misiones duales. El bombardero puede lanzar municiones a velocidades que evaden defensas aéreas y, además, realizar misiones de reconocimiento profundo en zonas hostiles. Su carga útil estandarizada y su capacidad para aterrizar en aeropuertos convencionales amplían sus posibilidades operativas.
The War Zone indica que esta aeronave podría penetrar defensas aéreas integradas como las de China o Rusia, gracias a su velocidad y alcance. A su vez, su diseño no tripulado elimina riesgos para el personal, lo que representa una ventaja significativa en operaciones de alto riesgo.
Según The Debrief, la capacidad del Mayhem para realizar ataques rápidos y recopilar inteligencia en tiempo real lo convierte en un nuevo estándar operativo. Esta aeronave redefine las estrategias de combate aéreo moderno al integrar precisión, velocidad y autonomía.
El programa, formalmente denominado Expendable Hypersonic Multi-mission ISR and Strike, no solo se centra en la velocidad, sino en la flexibilidad táctica que ofrece un sistema capaz de operar en distintos entornos y funciones. El enfoque en tecnologías hipersónicas busca asegurar la superioridad aérea estadounidense frente a adversarios emergentes.
Financiamiento, socios industriales y contexto geopolítico
El AFRL adjudicó un contrato de 334 millones de dólares a Leidos con una duración de 51 meses, hasta octubre de 2027. Draper, Kratos y Calspan se integran como socios clave, formando un equipo multidisciplinario con experiencia en sistemas de control, aeronáutica y simulación.
La primera etapa, financiada con 24 millones, concluyó con entregables como la SRR y la CoDR. Sin embargo, Asia Times reportó que la falta de fondos en el presupuesto FY2024 ha frenado los avances. A pesar de este contratiempo, el AFRL tiene previsto emitir nuevas órdenes para continuar el desarrollo tecnológico.
En 2016, Lockheed Martin presentó el concepto SR-72, una aeronave hipersónica no tripulada que podría alcanzar Mach 6. Aunque no hay conexión oficial con el Mayhem, medios como NextBigFuture han especulado sobre la posibilidad de que ambos proyectos compartan tecnologías de programas clasificados.
No obstante, el Mayhem se diferencia por su enfoque en scramCazas y diseño expendable, lo que lo posiciona como una plataforma independiente. Su arquitectura busca soluciones específicas para operaciones hipersónicas sostenidas y no pretende ser un simple sucesor del SR-72.
Impacto estratégico frente a amenazas en el Indo-Pacífico
Gracias a su capacidad para operar a Mach 10, el Proyecto Mayhem ofrece un contrapeso directo a armas como el Kinzhal ruso y el DF-17 chino, según EurAsian Times. Esta ventaja es especialmente relevante en el Indo-Pacífico, donde la velocidad y el alcance son elementos decisivos en un eventual conflicto regional.
El programa promete una transformación en el equilibrio estratégico al permitir incursiones rápidas y con alta precisión en territorios hostiles. Esta característica lo convierte en un elemento clave para neutralizar amenazas emergentes sin comprometer recursos humanos.
El diseño no tripulado, combinado con la autonomía operativa, le da al Mayhem un perfil ideal para misiones en entornos altamente disputados. Su capacidad para operar desde pistas convencionales amplía las opciones logísticas y reduce la dependencia de bases avanzadas.
De mantenerse el desarrollo según lo previsto, el Mayhem establecerá un nuevo estándar en aviación militar hipersónica. Aunque su éxito final dependerá del financiamiento futuro y la madurez tecnológica, el programa ya representa un hito en la evolución del combate aéreo del siglo XXI.