Rolls-Royce ha progresado significativamente en el desarrollo del motor F130, comenzando pruebas a nivel del mar en su planta de Indianápolis. Este avance es crucial para el F130, destinado a propulsar el B-52J Stratofortress de la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
Las pruebas, llevadas a cabo en la celda de pruebas 114, recientemente renovada, forman parte de una inversión de 1.000 millones de dólares de Rolls-Royce para modernizar sus instalaciones en Indianápolis. Además, la compañía completó exitosamente ensayos rápidos de dos cápsulas en el Centro Espacial Stennis de la NASA, marcando la primera evaluación de los motores F130 en la configuración de dos cápsulas específica del B-52. Estos ensayos han confirmado las previsiones de rendimiento de Rolls-Royce y han optimizado el proceso de integración del motor.
La validación del rendimiento, especialmente en condiciones de viento cruzado, es crucial para cumplir con las exigencias de la Fuerza Aérea. Durante 2023, Rolls-Royce avanzó en su programa del F130, clave para la modernización del B-52. En marzo de 2023, las pruebas confirmaron la configuración de doble cápsula del motor y sus controles digitales.

El F130, basado en la familia de motores BR de Rolls-Royce, promete extender la vida útil del B-52 por 30 años adicionales. Con más de 1.000 unidades en operación globalmente, se espera que el F130 aporte mejoras significativas.
En otro avance de la compañía, la Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón eligió los motores MT30 de Rolls-Royce para sus nuevos buques con el Sistema Aegis, marcando el primer uso mundial de propulsión electromecánica híbrida con dos motores MT30. Este proyecto subraya el compromiso de Rolls-Royce con el fortalecimiento de las capacidades de fabricación en Estados Unidos.
Con el motor F130 acercándose a la producción e integración final, Rolls-Royce continúa colaborando estrechamente con Boeing y la Fuerza Aérea para asegurar el cumplimiento de los hitos del programa y garantizar la eficacia continuada de la flota B-52.