El Ministerio de Defensa del Reino Unido considera el MQ-9B SkyGuardian como reemplazo del sistema Crowsnest para vigilancia aérea en portaaviones.
MQ-9B Protector: candidato para alerta temprana en portaaviones
El Ministerio de Defensa del Reino Unido evalúa una variante del MQ-9B SkyGuardian, conocida como Protector RG Mk1, para asumir la misión de alerta temprana aerotransportada y control (AEW&C) de la Royal Navy, reemplazando al sistema Crowsnest basado en helicópteros Merlin HM2. El 12 de mayo de 2025, el diputado conservador Ben Obese-Jecty presentó una pregunta parlamentaria al secretario de Estado de Defensa sobre la viabilidad de emplear el MQ-9 de General Atomics en operaciones desde portaaviones. La ministra de Defensa, Maria Eagle, respondió el 19 de mayo, confirmando que la Royal Navy ha determinado, a través de la Asociación de Apoyo a la Cooperación Internacional MQ-9, que el MQ-9B puede adaptarse para operar desde los portaaviones de la clase Queen Elizabeth. Este sistema se considera un candidato clave para cubrir la necesidad de alerta temprana tras la retirada del Crowsnest, prevista para 2029.
El Crowsnest, un sistema de vigilancia y control aerotransportado (ASaC) integrado en helicópteros Merlin, ha enfrentado problemas técnicos significativos, principalmente relacionados con fallos de software que limitan su rendimiento. A diciembre de 2023, su costo alcanzó £425.7 millones, sin lograr la capacidad operativa plena pese a despliegues en 2021 y 2025 con los grupos de ataque de portaaviones (CSG) liderados por los buques HMS Queen Elizabeth y HMS Prince of Wales. La necesidad de un reemplazo es urgente, ya que el sistema dejará de operar en 2029, dejando a los portaaviones sin capacidad AEW&C si no se implementa una solución a tiempo.
El 9 de abril de 2025, el Ministerio de Defensa emitió una solicitud de información (RFI) a la industria, titulada Carrier Strike Airborne Early Warning Initial Market Engagement, para evaluar la capacidad de desarrollar un sistema AEW&C compatible con los portaaviones Queen Elizabeth. La RFI busca un sistema que proporcione vigilancia persistente las 24 horas, detectando amenazas como misiles antibuque y aviones de ataque, permitiendo una respuesta efectiva. Los sistemas no tripulados (UAS) de despegue y aterrizaje cortos (STOL), como el MQ-9B, son la opción preferida por su mayor altitud operativa y tiempo de patrulla extendido.
El MQ-9B Protector ofrece ventajas significativas sobre el Merlin/Crowsnest. Con un techo de servicio de 40,000 pies, supera los 15,000 pies del helicóptero, ampliando el alcance del radar al extender la línea del horizonte. Además, su resistencia de más de 30 horas permite una vigilancia continua, imposible para helicópteros. Equipado con radar multimodo Lynx y sensores electroópticos/infrarrojos de alta definición, el MQ-9B garantiza inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) en tiempo real, esenciales para la protección de los CSG.
Datos clave sobre el MQ-9B Protector para la Royal Navy
- Capacidad STOL: Pruebas en túnel de viento en 2025 demostraron que el kit de despegue y aterrizaje corto, basado en el modelo Mojave, permite operaciones en portaaviones.
- Certificación aérea: El MQ-9B es el primer UAS grande certificado para operar sin restricciones geográficas, incluso sobre áreas pobladas, cumpliendo con estándares de la OTAN (STANAG 4671).
- Adaptabilidad: Su diseño de arquitectura abierta permite integrar sensores avanzados y sistemas de comunicación, como el Laser Airborne Communication-12 Terminal, para operaciones marítimas.
- Presupuesto estimado: El proyecto AEW&C tiene un costo proyectado de entre £500 millones y £1,500 millones, dependiendo del desarrollo requerido.
Desafíos y cronograma del reemplazo de Crowsnest
La transición al MQ-9B Protector implica retos técnicos y logísticos. A diferencia de los sistemas aerotransportados tradicionales, los UAS trasladan a la tripulación de misión —oficiales de sistemas de armas, controladores de tráfico aéreo y oficiales de operaciones— al portaaviones o a bases terrestres. Esto requiere instalar equipos adicionales en los buques para operar el UAS y transmitir datos de radar en tiempo real a aeronaves como los F-35B, que operan desde los portaaviones. La comunicación por enlace de datos, como el Link 16, es crucial para coordinar respuestas ante amenazas.
El cronograma plantea preocupaciones. La entrada en servicio del nuevo sistema AEW&C está proyectada entre 2030 y 2035, mientras que el Crowsnest se retirará en 2029. Esta discrepancia podría generar una brecha crítica en la capacidad de los CSG, dejando a los portaaviones vulnerables. Para mitigar este riesgo, el Ministerio de Defensa prioriza soluciones listas para usar, como el MQ-9B, que requiere menos desarrollo que un sistema completamente nuevo.
El MQ-9B ya está en servicio con la Royal Air Force como Protector RG Mk1, tras obtener la certificación militar en mayo de 2025, tras 11 años y una inversión de $500 millones por parte de General Atomics. Su diseño cumple con los estándares de aeronavegabilidad de la OTAN y permite operaciones seguras en espacios aéreos controlados. Países como Bélgica, Canadá, Polonia, Japón, Taiwán e India también han adquirido el MQ-9B, lo que refuerza su fiabilidad y versatilidad.
La Royal Navy ha explorado previamente la viabilidad del MQ-9B para portaaviones. En 2023, firmó un contrato de £1.5 millones para evaluar el modelo Mojave, una variante STOL del MQ-9B, en operaciones navales. Los avances en 2025, incluyendo pruebas de túnel de viento, han confirmado que el kit STOL permite despegues y aterrizajes en las cubiertas de los portaaviones Queen Elizabeth, que tienen 230 pies de ancho, suficientes para el MQ-9B con su envergadura de 79 pies.
Innovaciones recientes del MQ-9B para operaciones navales
General Atomics ha mejorado las capacidades del MQ-9B para misiones navales. En abril de 2025, en la exposición Sea-Air-Space, presentó una versión del MQ-9B SeaGuardian equipada con un pod láser de 25 kW, diseñado para defensa contra enjambres de drones. Este sistema utiliza tecnología de ganancia distribuida para optimizar tamaño, peso y potencia, ideal para operaciones en portaaviones. Además, en enero de 2025, se probaron sistemas de dispensación de sonoboyas, consolidando al SeaGuardian como el único UAS capaz de cazar submarinos mediante sensores acústicos.
El MQ-9B también incorpora capacidades de comunicación avanzadas. En 2022, General Atomics demostró el Laser Airborne Communication-12 Terminal, un sistema de comunicación láser aire-aire que puede integrarse en el MQ-9B como solución modular. Este sistema mejora la transmisión de datos en entornos marítimos, crucial para coordinar operaciones AEW&C.
La experiencia del Reino Unido con el MQ-9B es sólida. La Royal Air Force comenzó a incorporar el Protector RG Mk1 en 2024, y su interoperabilidad con fuerzas conjuntas y aliados de la OTAN lo convierte en una opción lógica para la Royal Navy. La certificación para operar en espacios aéreos civiles y militares, junto con su capacidad para misiones de inteligencia, vigilancia, adquisición de objetivos y reconocimiento (ISTAR), refuerza su idoneidad.
El interés global en el MQ-9B crece. En marzo de 2025, el Departamento de Estado de EE. UU. aprobó una venta potencial de $1,960 millones a Qatar, marcando la primera exportación del MQ-9B a Oriente Medio. Otros países, como Japón y Grecia, también han encargado unidades, lo que refleja la confianza en la plataforma.