La adquisición del TOS-3 por parte de Rusia marca un avance en sistemas de lanzamiento múltiple de cohetes termobáricos.
El TOS-3 y su Importancia Estratégica en el Conflicto Contemporáneo
El ejército de Rusia está a punto de enriquecer su arsenal con la última versión del sistema de lanzamiento múltiple de cohetes (MLRS) termobárico, el TOS-3. Este sistema representa una evolución de los modelos previos que ya han demostrado su valía en el campo de batalla, especialmente en el conflicto ucraniano. La planta de Omsktransmash en Omsk ha sido el epicentro de desarrollo de esta avanzada tecnología militar, donde se ha registrado una nueva marca y clasificación, insinuando el inminente lanzamiento del TOS-3.
El predecesor del TOS-3, el TOS-1A, conocido por su denominación “Solntsepek”, ha causado un impacto significativo gracias a sus misiles de ojiva termobárica. Este sistema ha capturado la atención internacional, destacándose el interés mostrado por el reino de Arabia Saudí, según reportes de BulgarianMilitary.com y declaraciones de Alexander Mikheev, director general de Rosoboronexport. Este interés se evidencia en la participación de Rusia en la Exposición Internacional de Riad, el World Defense Show 2024, donde se exhibe su poderío armamentístico, incluyendo negociaciones con Riad para la adquisición del sistema antiaéreo Pantsir-S1.

La especulación en torno al TOS-3 sugiere que este sistema, apodado “Dragón”, se montará sobre un chasis de oruga o tanque, posiblemente T-72 o T-80, debido a las limitaciones de producción de chasis T-90 por parte de Omsktransmash. Se espera que el TOS-3 sea capaz de disparar hasta 15 misiles, con variantes incendiarias o termobáricas, ofreciendo una versatilidad táctica notable frente a sus antecesores.
Análisis Técnico del TOS-3: Capacidad y Evolución
En comparación con las versiones anteriores, el TOS-3 presenta diferencias claras en capacidad y diseño. El TOS-1 Buratino, montado en un chasis T-72, puede lanzar 30 cohetes de 220 mm, mientras que el TOS-1A reduce esta cantidad a 24 cohetes. El TOS-2, o “Tosochka”, utiliza un chasis Ural sobre ruedas y tiene capacidad para 18 misiles. La reducción en la cantidad de cohetes del TOS-3 a 15 podría atribuirse a la implementación de sistemas de protección activa y dinámica, así como al peso adicional de los nuevos misiles TBS-M3, que prometen un alcance extendido hasta 15 km y una mayor potencia destructiva.

La tecnología de ojivas termobáricas, fundamental para el TOS-3, utiliza el oxígeno del aire para generar explosiones de alta temperatura e intensidad. Este mecanismo produce una onda expansiva sostenida y un efecto de vacío, causando daños extensos a estructuras y personal, además de generar incendios y asfixia. Estas características hacen del TOS-3 una herramienta devastadora en el campo de batalla, capaz de alterar significativamente la dinámica de un enfrentamiento.
El interés de Arabia Saudí en el TOS-1A resalta la relevancia estratégica de estos sistemas MLRS termobáricos. Las mejoras en alcance, potencia de fuego y maniobrabilidad, como se evidencia en la transición al TOS-3, demuestran un compromiso continuo con la innovación y la efectividad en la tecnología de armamento. La adaptación del TOS-1A a un chasis T-72 mejora significativamente su movilidad y resistencia, preparando el terreno para las capacidades avanzadas que el TOS-3 promete traer al arsenal militar ruso.