Los medios de comunicación estatales rusos difundieron ampliamente el mes pasado unas grabaciones que supuestamente mostraban a un F-35 israelí incapaz de superar una fuerte supresión electrónica.
Según los medios de comunicación, un F-35I Adir israelí no pudo alcanzar su objetivo durante unos ejercicios militares debido a las capacidades de guerra electrónica de Moscú.
La estrategia militar y de defensa del Kremlin se basa en gran medida en la guerra electrónica, a pesar de que esta afirmación es dudosa por diversas razones. De hecho, los soldados rusos emplean cada vez más técnicas de interferencia e interceptación mientras siguen avanzando en las fronteras de Ucrania. A la luz de las últimas afirmaciones de que Rusia ha impedido con éxito el despegue del avión de combate más moderno del mundo, Ucrania puede estar en alerta máxima.
Afirmación
En un vídeo difundido por sitios de medios de comunicación estatales rusos, una “munición terrestre, aparentemente disparada desde un F35, falla su objetivo”, lo que el sitio web afirma que es gracias a la “interferencia de guerra electrónica de los sistemas rusos”, afirma un analista de defensa del EurAsian Times.
Sin embargo, por muy especulativa que sea esta afirmación, ilustra la susceptibilidad del F-35 a los ataques de ciberguerra. La tecnología y los sistemas de armamento han convertido al avión furtivo de quinta generación en una fuerza a tener en cuenta. La incorporación de sistemas informáticos muy complejos ha mejorado el avión, pero a costa de hacerlo más vulnerable que sus antepasados, menos tecnológicos.
Sistemas para el F-35 Joint Strike Fighter
El Sistema Autónomo de Información Logística (ALIS) del F-35 es una de las características más innovadoras del avión. Gracias a él, los operadores de todo el mundo podrán obtener los mismos datos importantes de la plataforma. “El sistema de información es la columna vertebral del avión [F-35]”, afirma Lockheed Martin, que lo ha construido. Lockheed Martin afirma en un documento de apoyo que “ALIS es esencial para el mantenimiento y la explotación de los F-35”. Los datos de mantenimiento, de la cadena de suministro y del sostenimiento se integran en una única herramienta para apoyar todas las operaciones del F-35 como parte de una estrategia de sistema de sistemas.
Además de facilitar al personal de tierra el descubrimiento y la reparación de los fallos del caza, ALIS puede exponer al avión a ciberataques. Un alto cargo del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS) explicó la desaparición del ALIS a Global Defense Technology: Una de las principales preocupaciones del ALIS es que está tan vinculado y recoge datos de todos los usuarios del F-35 en todo el mundo que un hacker podría acceder fácilmente. “Es un avión basado en software, y cualquier plataforma basada en software va a ser objeto de piratería informática”, dijo el Director de la Oficina de Integración del F-35 de la Fuerza Aérea en una declaración posterior.
Rusia hace frecuentemente afirmaciones falsas sobre el F-35
Las acusaciones de Rusia sobre la vulnerabilidad del F-35 a los ataques de guerra electrónica no son verificables, a pesar de las preocupaciones razonables. Los cazas F-35I de Israel también han sido objeto de alegaciones dudosas en el pasado. Durante el verano de 2017, se afirmó que un misil sirio S-200 había golpeado un F-35 israelí. Aunque se disparó un misil antiaéreo contra uno de los aviones de guerra israelíes, las FDI afirmaron que el ataque no tuvo éxito.
Aunque la acusación de Rusia de haber interferido en el funcionamiento de un avión F-35 israelí es cuestionable, Moscú ha utilizado recientemente sus capacidades de guerra electrónica a una escala mucho mayor. El Kremlin ha lanzado una invasión a gran escala en Ucrania desde finales de febrero. Según fuentes de la prensa local, los soldados rusos están interfiriendo los sistemas GPS de Ucrania e interceptando sus comunicaciones militares. Los expertos y el Pentágono esperan que en el futuro se use “toda la gama de capacidades de guerra electrónica” de Rusia, a pesar de que Moscú no usó su capacidad cibernética al principio del asalto.
Se ha especulado que Moscú puede haber tardado en desplegar todo el peso de sus capacidades cibernéticas porque sus expertos carecen de la formación necesaria para emplear adecuadamente la tecnología. Un antiguo comandante del Ejército de Estados Unidos para Europa, el teniente general retirado Ben Hodges, dice a AP que los rusos finalmente la desactivaron porque estaba interfiriendo en sus propias comunicaciones.
Aunque Moscú ha incrementado su uso de armas cibernéticas, la historia de que sus sistemas electrónicos fueron capaces de frustrar el lanzamiento de un misil del F-35 sigue sin confirmarse. El hecho de que el arsenal cibernético de los rusos sea más avanzado que el de los ucranianos podría ser el propósito de este rumor.