Rusia impulsa la producción del Su-57, integrando tecnología furtiva y nuevos motores para consolidar su rol en la aviación militar.
Avances y producción del Su-57 Felon en Rusia
La Fuerzas Aeroespaciales Rusas recibieron en septiembre de 2024 un nuevo lote de cazas Su-57 Felon, fabricados por la United Aircraft Corporation (UAC) en la planta de Komsomolsk-on-Amur. Este avión, desarrollado por el Sukhoi Design Bureau, incorpora tecnología furtiva avanzada, con un fuselaje compuesto por un 25% de materiales compuestos, recubrimientos absorbentes de radar y bahías internas para armamento. Estas características reducen su sección transversal de radar, estimada en 0.1 metros cuadrados desde el frente, aunque su sigilo trasero es menos refinado. Desde su primer vuelo en enero de 2010, el programa ha superado retos técnicos, incluyendo un incendio en un prototipo en 2014, y avanza hacia la entrega de 76 unidades para 2028, con 22 cazas proyectados para finales de 2024.
El Su-57, con una eslora de 19.8 metros, envergadura de 13.95 metros y masa máxima de despegue de 34,000 kg, alcanza velocidades de hasta Mach 2 (aproximadamente 2,600 km/h) y un alcance de 4,000 km en trasbordo. Su diseño aerodinámico, con alas en flecha, canards y toberas de vectorización de empuje, permite maniobras con ángulos de ataque superiores a 60 grados y soportar cargas de hasta 9 g. Actualmente, utiliza motores AL-41F1, que generan 86 kN en seco y 142 kN con postcombustión, un 12% y 19% más potentes que los AL-31F de los Su-27. La próxima variante Su-57M incorporará los motores AL-51F (Izdeliye 30), con un aumento proyectado del 25% en empuje seco y 17% con postcombustión.
En 2024, el Su-57 participó en el AirShow China en Zhuhai, donde Rusia presentó la variante de exportación Su-57E. Ese mismo año, Rosoboronexport anunció un comprador internacional no identificado, con especulaciones apuntando a Argelia por sus lazos militares con Rusia. La producción en serie, iniciada en 2019, ha entregado hasta 20 unidades operativas a finales de 2024, a pesar de sanciones internacionales que limitan el acceso a componentes de alta tecnología. Rusia ha contrarrestado estas restricciones adquiriendo bienes de doble uso, como la máquina Siemens KLE 360 CNC, esencial para fabricar sistemas de radar y comunicaciones.
El Su-57 integra un radar AESA de banda X, complementado por radares de banda L para detectar objetivos furtivos, y una red de sensores en el fuselaje que ofrece conciencia situacional de 360 grados. Su sistema de guerra electrónica incluye contramedidas infrarrojas y señuelos activos. La cabina, con una pantalla multifunción y un head-up display, permite al piloto gestionar formaciones y asignar objetivos. El armamento incluye misiles aire-aire como el RVV-BD y aire-superficie como el Kh-69, además de un cañón GSh-30-1 de 30 mm. Las bahías internas alojan hasta cuatro misiles en la principal y dos en las laterales, con seis puntos externos adicionales.
Datos clave del Su-57 Felon para entender su relevancia
- Producción activa: Alcanzó 20 unidades operativas en 2024, con meta de 76 para 2028.
- Tecnología furtiva: 25% de materiales compuestos y bahías internas reducen su firma radar a 0.1 m² frontalmente.
- Motores avanzados: AL-51F en desarrollo promete 25% más empuje y supercrucero mejorado.
- Exportación: Variante Su-57E atrajo un comprador en 2024, posiblemente Argelia.
- Combate real: Realizó misiones en Ucrania y Siria, incluyendo ataques con misiles Kh-69.
Evolución y desafíos del programa Su-57
El programa PAK FA, iniciado en 2002, seleccionó a Sukhoi como desarrollador principal tras un contrato en 2003. El diseño conceptual se aprobó en 2004, y la construcción de prototipos comenzó en 2007. Tras el vuelo inaugural en 2010, se construyeron cinco prototipos para pruebas, enfrentando problemas como grietas en el fuselaje y fallos en los motores AL-41F1. La primera unidad de producción se estrelló en 2019, pero las entregas operativas comenzaron en 2020 con un avión equipado con el motor de primera etapa. En 2021, se entregaron cuatro cazas, y en 2022 comenzaron las entregas con motores mejorados.
El Su-57 ha sido probado en combate, con despliegues en Siria en 2018 y en Ucrania desde 2022. En Ucrania, realizó ataques con misiles Kh-69 desde Luhansk en febrero de 2024, operando junto a cazas Su-35. Sin embargo, un ataque ucraniano con drones en junio de 2024 dañó un Su-57 en la base de Akhtubinsk, a 589 km de la línea de frente. A pesar de esto, Rusia continúa integrando nuevas capacidades, como el dron Monochrome, lanzado desde el Su-57 para misiones de penetración profunda, probado en abril de 2024.
La variante Su-57M, presentada en mayo de 2025, incorpora motores AL-51F, aviónica mejorada y automatización avanzada. Su arquitectura abierta permite actualizaciones continuas, como sistemas de asistencia al piloto basados en inteligencia artificial y control de drones S-70 Okhotnik. La producción se ha ampliado con nuevas instalaciones en Komsomolsk-on-Amur, anunciadas en agosto de 2024, para cumplir con los objetivos de 2025. A pesar de sanciones, Rusia ha mantenido el suministro de componentes críticos mediante proveedores alternativos.
El Su-57 se distingue por su capacidad para operar desde pistas cortas, con un costo de mantenimiento menor que el de cazas occidentales como el F-35. Su versatilidad como cazabombardero, combinada con desarrollos como la integración de UAV y una cabina inteligente, asegura su relevancia en la estrategia militar rusa. La UAC reportó en julio de 2024 mejoras en sus capacidades para operaciones especiales, para reforzar su rol junto a los Su-34 y Su-35 en conflictos actuales.
Perspectivas globales y exportación del Su-57
El Su-57E, diseñado para exportación, se presentó en el MAKS-2019 y atrajo interés en AirShow China 2024. Aunque India abandonó el programa FGFA en 2018 por preocupaciones sobre sigilo y costos, Rusia busca mercados en África, Asia y América del Sur. La Su-75 Checkmate, un caza ligero basado en tecnologías del Su-57, complementa esta estrategia, con entregas previstas para 2026-2027. El Su-57 ha sido comparado con el F-22 y F-35, superando al primero en maniobrabilidad y al segundo en velocidad, aunque su sigilo es menos avanzado.
En noviembre de 2024, un Su-57 equipado con toberas de vectorización planas, desarrolladas para el dron S-70 Okhotnik, fue exhibido. Estas toberas, producidas mediante impresión 3D, reducen la pérdida de empuje y optimizan el rendimiento. Rusia también avanza en la integración de sistemas de inteligencia artificial, con pruebas de interfaces controladas por voz y ojo en la variante Su-57M.
A pesar de limitaciones en la producción, con solo 32 unidades construidas hasta 2024, Rusia mantiene su compromiso con el Su-57. La planta de Komsomolsk-on-Amur ha incrementado su capacidad, y el programa sigue adaptándose a sanciones mediante innovaciones locales. El Su-57, con su combinación de sigilo, maniobrabilidad y versatilidad, permanece como un pilar de la modernización aérea rusa, con un servicio proyectado de 40-50 años.Con entregas constantes, mejoras tecnológicas y un enfoque en la exportación, el programa avanza a pesar de desafíos externos.