La noticia de que Ucrania va a recibir misiles de largo alcance Storm Shadow suministrados por el Reino Unido ha provocado sin duda una oleada de comentarios.
Una vez más, Londres se adelanta a Washington. El ATACMS puede ser una línea roja para Estados Unidos, pero el Storm Shadow claramente no lo es para el Reino Unido.
Los Su-24 y Su-27, ¿capaces de portar el Storm Shadow?
¿Qué avión de combate del inventario disponible en Ucrania es capaz de utilizar esta arma? Habría que evaluarlo en función de dos indicadores: el peso del cohete y la compatibilidad. Si suavizamos el primer indicador MiG-29 y Su-25 de la Fuerza Aérea de Ucrania no podrán llevar esta arma. El peso máximo de la carga útil no se lo permite.
El cohete pesa casi 2.900 libras. Lo que hemos observado es que los MiG-29 y Su-25 transportan habitualmente 1.100 libras de carga útil. Estos dos aviones de combate están siendo eliminados, pero el Su-24 y el Su-27 permanecen. Pueden llevar un misil Storm Shadow. Cada uno puede llevar una carga útil de hasta 3.300 libras.
La integración y programación del misil
Pero, ¿pueden estos “caballos de batalla” operar el cohete? En principio, los expertos afirman que la integración es posible pero difícil. Cómo interactuarán la aviónica y los sensores anticuados de los Su-24 y Su-27 con el misil sigue siendo un misterio. De hecho, ya hemos visto una integración con éxito. El misil antirradiación estadounidense HARM se integró con éxito en el MiG-29 a mediados del año pasado.
Por supuesto, si la conexión entre el avión y el misil no puede realizarse, existe una segunda opción de programación. Está en tierra. Sí, el misil permite ser programado en tierra. Es decir, se puede fijar el objetivo antes de que el avión despegue. Esto significa que los aviones serán simplemente los portadores del arma. En el aire, tras el lanzamiento, no podrán dirigir el misil, ni modificar su trayectoria ni el momento de la explosión.
Las ventajas y desafíos del Storm Shadow
Storm Shadow no es inmune a ser interceptado. Especialmente después de ser lanzado y realmente no hay programación desde la cabina del caza. Pero el cohete tiene sus ventajas. Según los británicos, Storm Shadow se ha desarrollado para contrarrestar fuertemente la guerra electrónica [EW].
En resumen, el suministro de misiles Storm Shadow a Ucrania es un movimiento arriesgado, pero estratégicamente efectivo. Aunque la compatibilidad del misil con los aviones disponibles en Ucrania aún es una incógnita, la posibilidad de programarlo desde tierra puede ser una alternativa viable. Habrá que esperar para ver cómo se desarrollan los acontecimientos en los próximos meses.