Los cazas Su-25 y Su-34 a menudo trabajan en conjunto durante operaciones de combate, según confirmaron medios estatales rusos el año pasado.
El rol del Su-25 en la invasión de Ucrania y su despliegue táctico
La estrategia militar rusa probablemente emplea sus plataformas Su-34 para “cubrir” al Su-25 durante misiones de ataque a baja altitud. Analistas que estudian la invasión continua de Ucrania por parte de Rusia creen que el Su-25 ha sufrido las mayores pérdidas en los últimos dos años. En marzo, se compartieron ampliamente en redes sociales imágenes de un teléfono móvil que mostraban un Su-25 derribado.
Aunque no se documentó el trayecto del fuselaje hasta el suelo, los restos de la plataforma indican que ciertamente cayó del aire. Independientemente del historial del Su-25 en Ucrania hasta ahora, Moscú sigue dependiendo de este caza de la era soviética. En la década de 1960, la Fuerza Aérea Soviética estableció una competencia para encontrar su próximo avión de apoyo cercano en el campo de batalla.
El fabricante Sukhoi desarrolló el prototipo T-8 alrededor de esta época, que evolucionó hasta convertirse en el Su-25. El fuselaje de ataque a tierra realizó su primer vuelo a principios de los años 70 y, después de cinco años, completó sus pruebas de certificación.
Comparación técnica entre el Su-25 Frogfoot y el A-10 Warthog

El deseo de la URSS de desarrollar su propia aeronave de apoyo cercano siguió al esfuerzo de Estados Unidos por crear su jet “rompe tanques” A-10 Thunderbolt II “Warthog”. Aunque el Warthog y el Frogfoot fueron diseñados para cumplir misiones similares, los dos fuselajes tienen capacidades bastante diferentes. Ambos, el Su-25 y el A-10, están fuertemente blindados y a menudo se les llama “tanques voladores”.
Sin embargo, el Frogfoot es más pequeño, ligero y rápido que su contraparte estadounidense. Las variantes anteriores del jet ruso presentaban dos turborreactores no postcombustión R-95Sh. La aeronave está equipada con tanques de combustible autosellantes llenos de espuma que proporcionan una capacidad total de combustible de alrededor de 3,600 litros. Además, la provisión de cuatro tanques de combustible externos PTB-1500 que se llevan en los soportes bajo las alas puede extender el alcance del jet.
Según Air Force Technology, el Frogfoot puede ascender a una tasa de 58 m/s. “La velocidad máxima de la aeronave es de 950 km/h. El radio de combate y el alcance de ferry de la aeronave son de 375 km y 7,500 km respectivamente. El alcance normal del Su-25 es de 750 km, mientras que su techo de servicio es de 7,000 m. La carrera de despegue y aterrizaje del Su-25 son de 750 m y 600 m respectivamente. La aeronave pesa alrededor de 10,740 kg y su peso máximo al despegue es de 17,600 kg”.
Historial de combate del Su-25 en conflictos internacionales

Los soviéticos utilizaron extensamente el Frogfoot durante la guerra soviético-afgana en la década de 1980. Dado que los combatientes afganos entrenados con misiles Stinger suministrados por Estados Unidos pudieron derribar muchos de los Su-25, el caza demostró tener algunas vulnerabilidades significativas. En particular, los misiles tierra-aire lanzados desde el hombro (SAMS) causaron estragos en la flota soviética.
El Frogfoot también vio acción durante la Guerra Irán-Irak y la subsiguiente Guerra de Abjasia, donde el jet fue volado por la Fuerza Aérea de Georgia. El Su-25 fue ampliamente exportado en la década de 1980 y muchos de estos “tanques voladores” terminaron en estados exsoviéticos tras el colapso de la URSS. Además, el Su-25 sirve en fuerzas aéreas de Asia, el Medio Oriente, África y Sudáfrica.
A finales de febrero, las fuerzas ucranianas derribaron un fuselaje Su-25 ruso y capturaron a su piloto como “venganza” por anteriores ataques aéreos. Este incidente, junto con otros informes de pérdidas de Su-25 a lo largo de la guerra, indica que el “tanque volador” de Rusia no está desempeñándose tan bien como la Fuerza Aérea esperaba.