Los expertos en aeronáutica continúan examinando con interés el diseño del caza furtivo monomotor Su-75 Checkmate de Rusia, pese a su situación de pausa indefinida en el proyecto.
Explorando la potencialidad del Su-75 Checkmate
De acuerdo con la información brindada por los medios rusos, el Su-75 es un caza ligero, polivalente y ultramaniobrable de quinta generación, aunque su etapa de pruebas de vuelo no se ha definido aún. Cabe destacar que, entre sus características más sobresalientes, se encuentra la supuesta integración de inteligencia artificial en su sistema.
Actualmente, la atención aeroespacial se encuentra en el modelo Su-57 Felon, especialmente a la luz del conflicto en Ucrania. No obstante, se espera que tras este periodo de tensión, Rusia pueda redirigir sus esfuerzos hacia la producción y mejora del Su-57, dejando en segundo plano al Su-75.
El Su-75, presentado por primera vez hace dos años en el salón aeronáutico ruso MAKS, ha generado curiosidad entre los especialistas debido a su diseño, en particular su fuselaje, que recuerda la estructura del misil hipersónico 3M22 Zircon.
El diseño del Su-75: inspiración y ventajas técnicas
El Su-75 comparte con el Zircon una característica de diseño relevante: el conducto de aire que atraviesa el fuselaje hasta llegar al motor ubicado en la sección de cola. Esta peculiar disposición ha demostrado en el pasado su capacidad para soportar velocidades extremas y sobrecargas considerables.
Además, esta estructura es menos susceptible al sobrecalentamiento del fuselaje cuando se alcanzan velocidades ultraelevadas, lo cual suma un valor adicional a la eficiencia de la aeronave.
El diseño del fuselaje y de la toma de aire del Su-75, que rememora la estética del Zircon, se traduce en ventajas técnicas significativas. Según afirman los especialistas rusos, este diseño permite alcanzar la velocidad supersónica con cinco veces menos empuje específico que el misil supersónico 3M55 Onyx, en servicio actualmente, y tres veces menos tras superar la velocidad del sonido.
El diseño de Su-75 promete capacidades G extraordinarias
El Su-75, aun en desarrollo, está despertando conversaciones por su supuesta capacidad para soportar cargas de 10G en lugar de las habituales 8G. Los conductos de aire “Zircon” que dispone, contribuyen a este aumento de la velocidad.
Los expertos destacan cómo el diseño de la toma de aire y la cola del Su-75 buscan incrementar el sigilo del fuselaje en modos supersónicos, característico de los cazas de 5.ª generación.
El motor de plasma de fase 2 del Su-75, que cuenta con vectorización de empuje en todos los ángulos y un sistema de control electrónico-digital, conocido como Izdelie 30, también está generando expectativa.
Un avance significativo con respecto al Su-57
Este motor de última generación propulsará al Su-75 hacia nuevas fronteras de tamaño, peso, maniobrabilidad y características de vuelo, potencialmente superando con creces al Su-57.
Se prevé que el Su-75 sea extraordinariamente maniobrable, a la altura de la reputación de los cazas rusos en este aspecto.
Los pilotos de caza rusos destacan su capacidad para adaptarse a situaciones extremas y altas velocidades, cualidades inherentes a la marca Su.
La maniobrabilidad del Su-75 recuerda al MiG-21
Las capacidades de maniobrabilidad del Su-75 traen a la memoria las del MiG-21, que los pilotos estadounidenses recuerdan con respeto y cierta amargura desde la guerra de Vietnam.
En aquella época, el pequeño y maniobrable MiG soviético, similar en ciertos aspectos al misil Onyx, demostró su superioridad sobre aviones estadounidenses, incluido el F-4 Phantom II.
Estas anécdotas históricas refuerzan las altas expectativas sobre la maniobrabilidad del Su-75.
El Su-75: Un proyecto ambicioso en tiempo de desafíos
El Su-75, una aeronave de avanzada tecnología rusa, se encuentra en una situación incierta. La producción de este caza innovador, que cuenta con conductos de aire “Zircon” diseñados para soportar cargas a mayor velocidad, se ve amenazada por las circunstancias actuales.
Rusia, enfrentando restricciones que limitan su acceso a recursos y componentes occidentales, tiene dificultades para obtener los componentes esenciales para el Su-75. Para poder contar con las características tecnológicas propuestas, como la nueva aviónica, el radar de precisión y la inteligencia artificial, los diseñadores necesitan acceder a circuitos integrados, semiconductores y chips.
Sin embargo, estos componentes se encuentran en una disponibilidad limitada, lo que añade desafíos al desarrollo del Su-75.
La financiación del Su-75: Otro obstáculo a superar
Además de los desafíos técnicos, el proyecto del Su-75 también se ve amenazado por dificultades financieras. La guerra de Ucrania ha llevado a un aumento significativo en el gasto militar ruso, limitando así los fondos disponibles para nuevos desarrollos.
Para que el Su-75 se materialice, se requeriría el desarrollo de al menos tres prototipos funcionales, pero la financiación necesaria para lograr esto es incierta.
Adicionalmente, para que la producción sea viable, se requeriría un cliente dispuesto a comprar el caza, una posibilidad que se ve disminuida en el actual contexto internacional.
Los desafíos técnicos del Su-75: ¿Un punto de no retorno?
Finalmente, un obstáculo adicional para el Su-75 es de naturaleza técnica: la falta de claridad sobre la resolución del problema del azimut absoluto. Este caza ruso requeriría de sensores de azimut en su aviónica, tecnología en la que Rusia aún está en proceso de desarrollo.
El Su-57, otro caza ruso, aún no cuenta con estos sensores, y se sabe que solo el F-35 estadounidense los posee, lo que representa un desafío adicional para los ingenieros rusos.
La solución a este problema es crucial para el avance del Su-75, y sin ella, el proyecto podría enfrentar dificultades insuperables.
El futuro del Su-75: ¿Incertidumbre o resiliencia?
En resumen, el futuro del Su-75 se encuentra en una encrucijada. Los obstáculos técnicos, financieros y logísticos son desafíos significativos que podrían amenazar la viabilidad del proyecto.
No obstante, el ingenio y la resiliencia son características históricamente presentes en el desarrollo aeronáutico ruso. Solo el tiempo determinará si estas cualidades serán suficientes para superar los desafíos actuales y llevar al Su-75 a la línea de producción.