El famoso fabricante de motores a reacción Pratt y Whitney, una subsidiaria de United Technologies, se ha adjudicado un contrato de modificación de 2.100 millones de dólares de la Marina de los EE.UU. para los sistemas de propulsión F135.
Esta modificación define la producción y entrega de 112 sistemas de propulsión F135-PW-100 para la Fuerza Aérea, 46 sistemas de propulsión F135-PW-600 para el Cuerpo de Marines y 25 sistemas de propulsión F135-PW-100 para la Marina. Además, esta modificación define la adjudicación de componentes, piezas y materiales de plomo largo asociados con 129 F135-PW-100 y 19 F135-PW-600 sistemas de propulsión para participantes no estadounidenses del Departamento de Defensa (DoD) y clientes extranjeros de ventas militares (FMS).
El F135 de Pratt & Whitney es un turbofan de postcombustión desarrollado para el Lockheed Martin F-35 Lightning II, un caza de ataque monomotor. El sistema de propulsión F135 de Pratt & Whitney alimenta las tres variantes del avión de combate F-35 Lightning II: el F-35A CTOL (Despegue y Aterrizaje Convencional), el F-35B STOVL (Despegue y Aterrizaje Vertical Corto) y el F-35C CV (Variante de Portaaviones).
El F135-PW-100 utilizado en la variante de despegue y aterrizaje convencional del F-35A.
El F135 ha evolucionado a partir del probado motor F119, que alimenta exclusivamente el F-22 Raptor de la Fuerza Aérea de los EE.UU., y cuenta con la mejor fiabilidad de un solo motor de su clase, capacidades de ocultación de quinta generación, así como pronósticos avanzados y sistemas de gestión de la salud.
Desde la puesta en marcha del primer vuelo del F-35 en diciembre de 2006, el F135 ha mantenido altos niveles de preparación que han permitido que el programa cumpla con los objetivos de las pruebas de vuelo y apoye los requisitos operativos de las tres variantes de aeronaves. Las características de soporte están diseñadas para ofrecer facilidad de mantenimiento al mismo tiempo que se logra una confiabilidad y mantenibilidad del motor sin precedentes.