Después de años de salvajes teorías de conspiración, los científicos austriacos han demostrado que el criminal de guerra nazi Rudolf Hess murió en prisión en Berlín, y no fue reemplazado por un doble, como han sugerido los teóricos de la conspiración.
Rudolf Hess, el adjunto de Hitler entre 1933 y 1941, fue capturado después de que él fue a Escocia en 1941 por su propia voluntad, según se informa, para negociar un tratado de paz entre el Reino Unido y Alemania. Durante los juicios de Nuremberg celebrados después de la guerra, Hess fue condenado a cadena perpetua.
Rudolf Hess fue encarcelado en varias prisiones del Reino Unido, entre las que se encuentra la Torre de Londres. En 1947 fue trasladado a la prisión de Spandau en Berlín, donde permaneció hasta 1987, cuando se ahorcó en su celda.
Hess, quien murió a los 93 años, era conocido como Spandau # 7. Fue el último prisionero en Spandau, y la prisión fue demolida después de su muerte.
Durante décadas, las teorías de la conspiración arreciaron, diciendo que Rudolf Hess fue asesinado por los británicos después de ser capturado en Escocia, y que se colocó un doble en su lugar. Según las teorías, Spandau # 7 no se parecía en nada al “Hess original”, y también evitó reunirse con la familia Hess hasta 1969, lo que generó sospechas.
Una de las personas que creyó en los rumores fue el médico de Hess, Hugh Thomas, quien señaló las dudas sobre su terrible experiencia en Escocia, su negativa a ver a sus familiares y su “amnesia declarada”.
Ahora, un descendiente no identificado de Hess que aceptó proporcionar su ADN en comparación con una muestra tomada de Spandau # 7 en 1982, permitió a los investigadores descubrir la verdad.
“Ningún emparejamiento hubiera apoyado la teoría del impostor, pero finalmente tenemos un emparejamiento”, dijo el profesor Jan Cemper-Kiesslich de la Universidad de Salzburgo, quien formó parte del equipo de investigación.
Los resultados fueron concluyentes: las dos muestras de ADN provinieron de dos individuos que tenían un 99.9% de probabilidad de estar relacionados. Después de años de dudas, se puede decir con certeza que Rudolf Hess, el ex nazi de alto rango, se ahorcó en su celda en 1987.