El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, desestimó la acusación de genocidio presentada por Sudáfrica ante la CIJ contra Israel en Gaza.
Canadá, a través de su primer ministro, Justin Trudeau, ha manifestado su rechazo a la acusación de genocidio presentada por Sudáfrica ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) contra Israel por su actuación en la Franja de Gaza. El caso se centra en las alegaciones de que Israel tiene intenciones genocidas contra los palestinos en medio del conflicto con el grupo terrorista Hamás.
Israel ha negado vehementemente estas acusaciones y ha argumentado que carecen de fundamento. Trudeau, aunque reafirmó el apoyo de Canadá a la CIJ y sus procesos, aclaró que no respalda la premisa del caso presentado por Sudáfrica.
Estados Unidos también ha declarado que el caso sudafricano carece de fundamento. La ministra canadiense de Asuntos Exteriores, Melanie Joly, reiteró los comentarios de Trudeau en un comunicado.
La posición de Canadá respecto al conflicto en Gaza ha sido objeto de debate, especialmente dentro del Partido Liberal de Trudeau, que incluye legisladores judíos y musulmanes con diferentes perspectivas. Trudeau inicialmente defendió el derecho de Israel a defenderse, pero a medida que aumentaba el número de víctimas civiles en Gaza, su postura se ha vuelto más matizada.
Trudeau expresó su preocupación por la magnitud de la crisis humanitaria en Gaza y los riesgos para los civiles palestinos. El Partido Conservador de Canadá, líder en las encuestas, acusó a Trudeau de tener un doble discurso sobre el tema.
Reino Unido y Alemania rechazan acusación de Sudáfrica a Israel
El primer ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, también rechazó el caso de Sudáfrica como injustificado y erróneo, afirmando el derecho de Israel a defenderse en el marco del derecho internacional.
Alemania, en cambio, advirtió contra la “instrumentalización política” de la acusación de genocidio y anunció su intervención como tercera parte ante la CIJ. Argumentaron que Israel estaba defendiéndose de un ataque inhumano de Hamás en octubre y que las acusaciones de genocidio carecían de base.
El equipo jurídico de Israel en La Haya atacó las afirmaciones de Sudáfrica, argumentando que la CIJ no tenía jurisdicción sobre las denuncias y que los daños a civiles palestinos eran el resultado del uso de infraestructura civil por parte de Hamás con fines militares. También destacaron las medidas humanitarias tomadas por Israel en la región.