El embajador de Israel ante las Naciones Unidas, Danny Danon, reaccionó con dureza ante las acusaciones del representante de la Autoridad Palestina ante la ONU, Riyad Mansour, quien afirmó que Israel había iniciado una “respuesta moralmente depravada” a los ataques de Hamás desde Gaza.
Mansour también había escrito al Consejo de Seguridad que la reciente limitación de Israel de los bienes que se mueven a través del cruce de Kerem Shalom equivalía a un “castigo colectivo a la población civil palestina”.
“Es moralmente reprensible hacer estas acusaciones contra Israel mientras los terroristas de Hamás continúan sus ataques incendiarios contra Israel, quemando miles de acres de campos agrícolas y vida silvestre, y amenazando las escuelas y hogares de nuestro sur”, dijo el Embajador Danon.
“Los residentes de Gaza deben entender que la responsabilidad de su difícil situación recae exclusivamente en aquellos que eligen lanzar bombas en los jardines de niños israelíes”, continuó.
En su carta a los miembros del Consejo de Seguridad, Mansour acusó además al gobierno israelí de “cerrar el cruce Kerem Shalom, el único cruce comercial de Gaza para mercancías dentro y fuera de Gaza, cortando suministros vitales y prohibiendo todas las exportaciones desde Gaza, poniendo miles de puestos de trabajo en riesgo, causando el aumento de los precios de los materiales esenciales, y agravando la devastadora situación humanitaria ya desenfrenada en la Franja de Gaza, donde el 49% de los palestinos están desempleados”.
En respuesta, Danon dijo, “los residentes de Gaza tendrían pleno acceso a todos los suministros humanitarios que Israel proporciona, si Hamás no desvía estos recursos para construir túneles terroristas o lanzar cohetes contra nuestra población civil”.
A principios de esta semana, Hamás advirtió a Israel que su decisión de reducir la transferencia de combustible y gas a través del cruce Kerem Shalom tendría “graves consecuencias”.
La semana pasada, el primer ministro Binyamin Netanyahu y el ministro de Defensa, Avigdor Liberman, anunciaron que el cruce de Kerem Shalom se cerraría temporalmente con la excepción de los casos humanitarios. La decisión fue tomada en respuesta a los continuos ataques incendiarios perpetrados por terroristas de Gaza usando cometas y globos enviados desde Gaza al territorio israelí, así como otros intentos de ataques terroristas.
Luego de esa decisión, Hamás decidió evitar que las importaciones de fruta de Israel ingresen a Gaza, una acción destinada a “castigar” a Israel, pero que esencialmente perjudica a los habitantes de Gaza.