La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó una legislación para sancionar a la Corte Penal Internacional (CPI) tras las órdenes de arresto emitidas contra el primer ministro Benjamin Netanyahu y el ex ministro de Defensa, Yoav Gallant.
El proyecto de ley aún debe pasar por el Senado, donde se prevé que la aprobación sea más complicada. Para lograrlo, los republicanos necesitarían el apoyo de unos siete demócratas, lo que resulta incierto dado que la administración de Biden, en su mandato saliente, se ha mantenido neutral respecto a sanciones contra la corte, por su respaldo a las sanciones impuestas al presidente ruso Vladimir Putin.
El resultado de la votación en la Cámara de Representantes fue contundente, con 243 votos a favor y 155 en contra, además de una abstención. Los 155 votos en contra provienen en su mayoría de los demócratas, mientras que el único republicano que se abstuvo fue Thomas Massie, quien argumentó que la Cámara no debía involucrarse en disputas internacionales. Alrededor de 30 demócratas se unieron a los republicanos para avanzar con la iniciativa.
Este avance recuerda a una legislación similar presentada el año pasado, que no logró pasar en el Senado. Sin embargo, la diferencia en esta ocasión fue el número menor de votos negativos, influido por la ausencia de algunos legisladores debido al funeral del ex presidente Jimmy Carter y los incendios forestales en Los Ángeles.
Desde el inicio de la nueva legislatura, los republicanos han hecho de esta legislación una prioridad. El líder republicano del Senado, John Thune, ha expresado su compromiso de aprobarla. El proyecto de ley propone sancionar a cualquier funcionario o entidad de la CPI que participe en investigaciones o procesos judiciales contra ciudadanos de Estados Unidos o de sus aliados. Las sanciones incluirían restricciones a visas y la prohibición de transacciones inmobiliarias en el país.
En su defensa, la legislación destaca que Estados Unidos e Israel no son parte del Estatuto de Roma que fundó la CPI, por lo que la corte no tendría jurisdicción sobre sus actos. AIPAC ha instado a los legisladores a apoyar el proyecto de ley, mientras que el grupo más moderado, J Street, ha expresado su oposición.