La embajadora de Estados Unidos ante la ONU hizo un raro gesto público de compasión hacia su homólogo iraní en la cámara del Consejo de Seguridad el jueves, al expresar sus condolencias por la muerte de un niño iraní.
Desde que Washington se retiró del acuerdo nuclear con Irán en mayo de 2018, las tensiones entre Estados Unidos y Teherán han aumentado.
Pero después de una polémica reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el cumplimiento del acuerdo de 2015 entre las potencias mundiales e Irán, la embajadora Kelly Craft se acercó para hablar con el embajador de Irán en la ONU, Majid Takht Ravanchi.
Ravanchi había hablado sobre una niña de dos años durante su declaración ante los 15 miembros del Consejo. Dijo que la niña había muerto en junio de una enfermedad rara conocida como EB y culpó de la muerte a las sanciones de Estados Unidos.
Un funcionario de la misión de Estados Unidos ante la ONU dijo que Craft estaba expresando sus condolencias a Ravanchi.
El portavoz de la misión iraní en la ONU, Alireza Miryousefi, dijo que “solo tuvieron una breve conversación sobre los pacientes con EB afectados por las sanciones”.
“No está fuera de lo normal que los diplomáticos de la ONU acreditados ante la ONU se encuentren, o tengan breves encuentros, en el cuartel general”, escribió Miryousefi.
Sin embargo, tales interacciones directas entre funcionarios iraníes y estadounidenses han sido muy raras en los últimos años.
Desde que el presidente estadounidense Donald Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo nuclear, su administración ha vuelto a imponer sanciones a Teherán con el objetivo de ahogar las ventas de crudo iraní, la principal fuente de ingresos de la República Islámica.
Aunque los alimentos, medicinas y otros suministros humanitarios están exentos de las sanciones estadounidenses, las medidas de Estados Unidos dirigidas a todo, desde la venta de petróleo hasta el transporte y las actividades financieras, han disuadido a varios bancos extranjeros de hacer negocios con Irán, incluyendo acuerdos humanitarios.
Ravanchi se lo dijo al consejo: “Es una lástima que la intimidación de Estados Unidos haya resultado en la suspensión de la exportación de ciertas medicinas a Irán, lo que ha causado una pesadilla para algunos pacientes”.
“Por ejemplo, una empresa europea, bajo la presión de las sanciones estadounidenses, ha dejado de exportar vendas especiales para pacientes que sufren de EB, una rara enfermedad genética que provoca fácilmente ampollas en la piel”, dijo.
Luego le dijo al consejo que la pequeña iraní, llamada Ava, no pudo obtener el tratamiento que necesitaba.
Craft se lo había dicho al Consejo de Seguridad: “Estados Unidos está dispuesto a dialogar con Irán para negociar un acuerdo que sirva mejor a la paz y la seguridad internacional. Pero no nos quedaremos de brazos cruzados mientras Irán continúa desestabilizando la región”.
La administración Trump se ha quejado de que el acuerdo de 2015 no fue lo suficientemente lejos en restringir el programa de misiles de Irán o sus guerras por encargo en Oriente Medio.