Una delegación de embajadores de la ON que llegó a Israel visitó la frontera con el Líbano el domingo y observó de cerca uno de los túneles de terror transfronterizos de Hezbolá descubiertos recientemente por las fuerzas israelíes.
Cuarenta embajadores de la ONU llegaron a Israel el jueves pasado para una gira por el país organizada por el embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, quien había dirigido previamente a la delegación en una visita a Polonia. Los embajadores visitaron Varsovia y el campo de exterminio de Majdanek, donde celebraron un servicio en memoria de los seis millones de judíos asesinados en el Holocausto.
El domingo, la delegación se reunió con el premier israelí Benjamin Netanyahu y el presidente Reuven Rivlin en Jerusalén, antes de dirigirse al norte para visitar la frontera con el Líbano.
Durante el recorrido por la frontera norte, la delegación visitó uno de los túneles de terror transfronterizos construidos por Hezbolá desde el sur del Líbano hasta el norte de Israel.
Desde diciembre pasado hasta enero, las fuerzas de las FDI operaron a lo largo de la frontera para localizar y demoler túneles de terror transfronterizos en una operación denominada «Escudo del Norte».
Mientras inspeccionaban la entrada de uno de los túneles recientemente descubiertos, los embajadores recibieron información de los oficiales de las FDI sobre la Operación Escudo del Norte y las intenciones de Hezbolá de usar estos túneles de terror contra Israel.
«La lucha contra Hezbolá también es una lucha diplomática«, dijo Danon a la delegación. “Hezbolá ha establecido un Estado en el sur del Líbano y ha construido varios túneles para dañar a los residentes israelíes. Esta es una oportunidad para que la comunidad internacional pida al Gobierno libanés que renuncie a Hezbolá, en lugar de darle carteras en el Gobierno y exija que el Consejo de Seguridad lo reconozca como una organización terrorista de inmediato».