El jefe de derechos humanos de las Naciones Unidas expresó su alarma por la abierta “retórica genocida” de los funcionarios israelíes sobre Gaza y pidió una acción internacional decisiva para “poner fin a la carnicería”.
Afirmó que el enclave palestino ya era “un cementerio”.
Israel negó con firmeza que esté llevando a cabo un genocidio en Gaza, y aseguró que las operaciones militares se centran en derrotar al grupo terrorista Hamás y rescatar a los rehenes.
En su discurso de apertura de la 60.ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Volker Turk criticó “el asesinato masivo de civiles palestinos en Gaza por parte de Israel y la imposición de sufrimiento indescriptible y destrucción total”.
“El asesinato masivo de civiles palestinos por parte de Israel en Gaza, la imposición de sufrimiento indescriptible y destrucción total, la obstaculización de la ayuda vital suficiente y la consiguiente inanición de civiles, el asesinato de periodistas, personal de la ONU y trabajadores de ONG, y la comisión de crímenes de guerra, están conmocionando la conciencia del mundo”, afirmó.
“Estoy horrorizado por el uso abierto de la retórica genocida y la vergonzosa deshumanización de los palestinos por parte de altos funcionarios israelíes”.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos subrayó que casi dos años después de que estallara la guerra tras la mortal masacre de Hamás el 7 de octubre de 2023 en Israel, “la región clama por la paz”.
“Gaza es un cementerio”, dijo al consejo de derechos.