El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, advierte que Gaza está cerca del borde de la guerra y expresa su conmoción por la cantidad de habitantes de Gaza muertos y heridos por el fuego vivo israelí durante las manifestaciones violentas, en un informe obtenido por la AFP el lunes.
Guterres dijo al Consejo de Seguridad que “condena de manera inequívoca los pasos de todas las partes que nos han llevado a este punto peligroso y frágil” en el conflicto árabe/palestino– israelí.
El informe fue enviado al consejo la semana pasada antes de una reunión el martes sobre la crisis israelo-palestina.
Refiriéndose a la violencia reciente en Gaza, Guterres dijo, según la AFP, “es y debe ser una advertencia a todos lo cerca que está de la guerra la situación”.
“Estoy conmocionado por la cantidad de muertos y heridos palestinos que resultan del uso de fuego vivo por las Fuerzas de Defensa de Israel desde que comenzaron las protestas”, agregó.
Israel tiene la responsabilidad de “ejercer la máxima moderación y proteger a los civiles de acuerdo con el derecho internacional humanitario”, escribió el jefe de la ONU.
“El asesinato de niños, así como de periodistas y personal médico claramente identificados por parte de las fuerzas de seguridad durante una manifestación son particularmente inaceptables”, agregó.
Guterres renovó su llamado para una investigación independiente de las muertes por disparos en Gaza.
Al mismo tiempo, el jefe de la ONU también criticó a Hamás y otros grupos terroristas por intentar colocar explosivos cerca de la valla y por disparar cohetes contra Israel el 29 y 30 de mayo.
Señaló a “altos funcionarios del gobierno israelí por afirmar que todos los palestinos estaban afiliados a Hamás”, lo que, según afirmó, “señala una política permisiva israelí hacia el uso de fuego real contra los manifestantes”.
También criticó las “actividades de asentamiento” de Israel, según AFP, diciendo que “continúan sin disminuir”.
Guterres dijo que la construcción de “asentamientos debe “cesar de manera inmediata y completa”.
Los llamados disturbios violentos de “Marcha del Retorno”, abiertamente alentados por Hamás, han estado en marcha desde el 30 de marzo.
En estos disturbios violentos semanales, los habitantes de Gaza arrojaron piedras, bombas incendiarias y llantas flamígeras a los soldados israelíes que aseguran la frontera. Los islamistas también han utilizado improvisadas “cometas terroristas” y globos para arrojar explosivos sobre las posiciones israelíes.
El más violento de estos disturbios tuvo lugar el 14 de mayo. 60 habitantes de Gaza fueron muertos en esos disturbios, pero Hamás admitió abiertamente que la mayoría de los muertos eran miembros del grupo.
La FDI concluyó la semana pasada que una investigación inicial reveló que una paramédica de Gaza que fue muerta durante la violencia islamista en la frontera de Gaza no fue blanco deliberado de ningún soldado israelí, a pesar de que los árabes palestinos afirman lo contrario.
La ONU no ha condenado a Hamás por los violentos disturbios. La semana pasada, la Asamblea General de la ONU votó para condenar a Israel por sus acciones en Gaza, pero rechazó una enmienda de los EE. UU. que habría culpado a Hamás por la violencia.