Israel se alineó con Estados Unidos y Rusia el lunes al votar contra una resolución de la Asamblea general de la ONU que exige respetar la integridad territorial de Ucrania y condena con firmeza la invasión rusa iniciada hace tres años.
El respaldo de Israel a esta postura, probablemente un gesto hacia el presidente Donald Trump, rompe con su historial: es la primera vez que vota contra Ucrania y a favor de Rusia desde el estallido de la guerra. Hasta ahora, Jerusalén había equilibrado su apoyo simbólico a Ucrania con la necesidad de mantener relaciones con Moscú por su rol en Siria.
La resolución obtuvo amplio apoyo: 93 países votaron a favor de condenar la invasión rusa de 2022 y exigir la devolución de los territorios ocupados por sus tropas durante la guerra.
Solo Israel, Estados Unidos y Rusia, junto a Corea del Norte, Hungría y otros 13 países, se opusieron. Argentina, Emiratos Árabes Unidos, China e Irán, entre 65 naciones, prefirieron abstenerse.
Tras asumir el cargo en enero, Trump dio un giro radical a la política de la Casa Blanca, abandonando el respaldo a Ucrania que marcó la era de Joe Biden.
El miércoles, el presidente llamó “dictador” a Volodymyr Zelensky y lo atacó tras las críticas del líder ucraniano, quien acusó a Trump de ceder ante la desinformación rusa y buscar un fin a la guerra en términos ventajosos para Moscú.
La guerra forzó a Ucrania a aplazar las elecciones de abril de 2024, decisión avalada por sus leyes en tiempos de conflicto.
Steve Witkoff, enviado especial de Trump, evitó en una entrevista con CNN el domingo culpar exclusivamente a Rusia por la guerra y afirmó que las intenciones de Ucrania de integrarse a la OTAN desencadenaron la invasión.
Esa declaración siguió a afirmaciones falsas de Trump, quien aseguró que Ucrania empezó la guerra con Rusia y que Zelensky enfrenta un rechazo masivo de su pueblo.
Estados Unidos propuso el lunes una resolución alternativa para negociar el fin de la guerra sin señalar la agresión rusa, pero no la apoyó con su voto y el texto fue rechazado.