La Corte Internacional de Justicia dicta nuevas medidas provisionales contra Israel, ordenándole que aumente el suministro de bienes humanitarios básicos a la Franja de Gaza, incluidos alimentos, agua, combustible y refugio, debido a lo que considera un empeoramiento de las condiciones de vida de los palestinos en el territorio devastado por la guerra.
“Las catastróficas condiciones de vida de los palestinos de la Franja de Gaza se han deteriorado aún más, en particular a la vista de la prolongada y generalizada privación de alimentos y otros artículos de primera necesidad a la que se han visto sometidos los palestinos de la Franja de Gaza”, afirma el tribunal en su decisión.
“Los palestinos de Gaza ya no se enfrentan solo a un riesgo de hambruna, como se señala en la Orden de 26 de enero de 2024, sino que la hambruna se está instalando”, dice el tribunal, añadiendo que “las medidas provisionales indicadas en la Orden de 26 de enero de 2024 no abordan plenamente las consecuencias derivadas de los cambios en la situación… lo que justifica la modificación de estas medidas”.
La CIJ reafirma las medidas ordenadas en enero, y ordena además a Israel que garantice “el suministro sin trabas y a escala… de los servicios básicos y la asistencia humanitaria que se necesitan urgentemente, incluidos alimentos, agua, electricidad, combustible, refugio, ropa, requisitos de higiene y saneamiento” y suministros médicos, así como “aumentar la capacidad y el número de pasos fronterizos terrestres y mantenerlos abiertos todo el tiempo que sea necesario”.
El tribunal también ordena a Israel que garantice que el ejército “no comete actos” que violen la Convención sobre el Genocidio “incluso impidiendo, mediante cualquier acción, la entrega de la ayuda humanitaria que se necesita urgentemente”, y ordena a Israel que informe al tribunal en el plazo de un mes.
El 26 de enero, la CIJ ordenó a Israel que cumpliera una serie de medidas provisionales basadas en su conclusión de que existía verosimilitud en una solicitud presentada por Sudáfrica contra Israel en el sentido de que las acciones de Israel en Gaza entraban en el ámbito de aplicación de la Convención sobre el Genocidio.