La ONU dijeron el miércoles que estaba muy preocupada por los informes que indicaban que 11 civiles habían sido asesinados en una operación de las fuerzas de seguridad afganas en una provincia oriental cerca de la frontera con Pakistán.
Las víctimas civiles en Afganistán han ido en aumento, a pesar de los intentos de Estados Unidos y los talibanes de negociar un acuerdo para poner fin a la guerra de 18 años.
La principal agencia de seguridad del gobierno, la Dirección Nacional de Seguridad (NDS), dijo que la operación en la provincia de Paktia había atacado un escondite talibán y que entre los 11 terroristas muertos había dos comandantes.
La Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) dijo que estaba muy preocupada por los asesinatos durante una operación de búsqueda y que un equipo de derechos humanos estaba investigando actualmente.
“La responsabilidad es esencial. El daño a los civiles debe cesar”, dijo la agencia en un artículo publicado en Twitter.
Un político de la zona dijo que las fuerzas del gobierno atacaron una reunión de estudiantes durante la fiesta de Eid al-Adha.
“Un estudiante universitario había invitado a cenar a sus compañeros de clase”, dijo a Reuters Allah Mir Khan Bahramzoi, miembro del consejo provincial de Paktia.
“A última hora de la tarde, las fuerzas de seguridad rodearon la casa, sacaron a las víctimas de la casa de huéspedes y les dispararon una a una”, dijo por teléfono desde la provincia.
La NDS dijo que las armas y municiones fueron confiscadas en la redada.
“Esta operación se llevó a cabo en base a información operativa sobre un escondite talibán y no dejó víctimas civiles”, dijo la agencia en un comunicado.
Las Naciones Unidas dicen que casi 4.000 civiles resultaron muertos o heridos en el primer semestre del año. El balance incluyó un gran aumento en el número de bajas infligidas por el gobierno y las fuerzas extranjeras lideradas por Estados Unidos.
Las incursiones terrestres y los enfrentamientos causaron la mayor cantidad de víctimas civiles, seguidos de ataques con bombas y ataques aéreos, dijo la UNAMA en un informe del mes pasado.
La violencia no ha cesado, a pesar de que tanto los talibanes como los Estados Unidos han informado de progresos significativos en las conversaciones sobre un pacto para que las tropas estadounidenses se retiren a cambio de una promesa talibán de que Afganistán no será utilizado como base para futuros ataques terroristas.
Su última ronda de conversaciones terminó el lunes sin un acuerdo final. No se ha anunciado ninguna fecha para la próxima ronda.