La ONU designó a Ian Martin para revisar a la UNRWA tras acusaciones de vínculos con Hamás y problemas operativos en Gaza.
Designación de Ian Martin para revisar a la UNRWA
El secretario general de la ONU, António Guterres, seleccionó al diplomático británico Ian Martin para liderar una evaluación estratégica del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en el Cercano Oriente (UNRWA), según informó AFP el 22 de abril de 2025. La decisión responde a la creciente presión política y las dificultades financieras que enfrenta la agencia, especialmente tras las acusaciones de Israel sobre la participación de su personal en actividades terroristas.
Durante una rueda de prensa, el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, explicó que la revisión busca optimizar el funcionamiento de la UNRWA en un entorno complejo. “Queremos garantizar que la UNRWA sirva de la mejor manera a las comunidades que dependen de ella”, afirmó Dujarric, subrayando que el objetivo no es cuestionar el mandato de la agencia, sino mejorar su operatividad.
Ian Martin, formado en Cambridge y Harvard, cuenta con experiencia en crisis humanitarias y políticas en países como Libia, Somalia, Timor Oriental, Nepal, Eritrea, Ruanda y Haití. Su nombramiento se enmarca en la iniciativa ONU80, lanzada en marzo de 2025 para abordar las tensiones financieras que afectan a varios organismos de las Naciones Unidas, con un enfoque particular en la UNRWA debido a su rol crítico en Gaza.
La evaluación estratégica analizará los desafíos políticos, financieros y de seguridad que enfrenta la UNRWA, especialmente tras las acusaciones de Israel sobre la colaboración de la agencia con Hamás, un grupo designado como terrorista por Israel, Estados Unidos y la Unión Europea. Estas críticas se intensificaron desde octubre de 2023, cuando Israel presentó evidencia de la participación de empleados de la UNRWA en actos terroristas.
Datos clave sobre las acusaciones contra la UNRWA
- Israel acusó a 12 empleados de la UNRWA de participar en los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023.
- Un dossier israelí detalló que trabajadores de la UNRWA secuestraron a una mujer y distribuyeron municiones durante la masacre en el kibutz Be’eri.
- La exrehén Emily Damari afirmó haber sido retenida en una escuela de la UNRWA en Gaza.
- El informe Colonna de abril de 2024 identificó problemas de neutralidad en la UNRWA, pero señaló que Israel no proporcionó pruebas de vínculos generalizados con terroristas.
- Países como Estados Unidos y Reino Unido suspendieron temporalmente la financiación a la UNRWA en 2024 tras las acusaciones.
Acusaciones de Israel y respuesta de la ONU
En octubre de 2023, Israel reveló un dossier que implicaba a empleados de la UNRWA en los ataques terroristas de Hamás del 7 de octubre, que dejaron 1.200 muertos y 250 rehenes. Según el documento, trabajadores de la agencia participaron en el secuestro de una mujer, distribuyeron municiones y estuvieron involucrados en la masacre del kibutz Be’eri, donde murieron 97 personas. Estas revelaciones llevaron a Guterres a crear un grupo de revisión liderado por la exministra francesa Catherine Colonna.
El informe de Colonna, publicado en abril de 2024, reconoció problemas de neutralidad en la UNRWA, como la falta de controles estrictos en la contratación de personal. Sin embargo, afirmó que Israel no había proporcionado pruebas de que un número significativo de empleados fueran miembros de organizaciones terroristas. El informe recomendó medidas para fortalecer la supervisión interna de la agencia.
Más recientemente, Emily Damari, una exrehén con ciudadanía británica e israelí, liberada tras 470 días de cautiverio, declaró que fue retenida en una escuela de la UNRWA en Gaza. Damari informó al primer ministro británico, Keir Starmer, que se le negó atención médica adecuada durante su detención. El coordinador humanitario de la ONU, Tom Fletcher, negó estas acusaciones, afirmando que “no ha visto ni una pizca de evidencia” que sugiera la participación de la UNRWA en la retención de rehenes.
Las críticas a la UNRWA también incluyen denuncias sobre su sistema educativo. Israel y organizaciones como IMPACT-se han documentado que los materiales escolares de la UNRWA en Gaza glorifican la yihad, el martirio y el odio hacia Israel. Un informe de IMPACT-se de 2023 analizó libros de texto que exaltaban a terroristas como Dalal Mughrabi, responsable de un ataque en 1978 que mató a 38 civiles. La UNRWA ha defendido sus programas educativos, afirmando que cumplen con los estándares de la UNESCO.
Infraestructura de la UNRWA y vínculos con Hamás
Israel ha denunciado que las instalaciones de la UNRWA en Gaza han sido utilizadas por Hamás para actividades terroristas. En febrero de 2024, el ejército israelí descubrió un túnel de Hamás bajo la sede de la UNRWA en la ciudad de Gaza, que contenía servidores y equipos electrónicos. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) también informaron que encontraron armas y explosivos en escuelas de la UNRWA durante operaciones en 2023 y 2024.
En julio de 2024, el gobierno israelí aprobó un proyecto de ley que declara a la UNRWA como una “organización terrorista” y prohíbe su operación en Israel. La legislación, impulsada por el partido Likud, argumenta que la agencia ha sido infiltrada por Hamás y no cumple con su mandato humanitario. La UNRWA rechazó estas acusaciones, afirmando que cumple con los principios de neutralidad de la ONU.
Tras las acusaciones iniciales de Israel en 2023, varios países, incluidos Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Alemania, suspendieron temporalmente su financiación a la UNRWA, que representaba cerca de 450 millones de dólares en 2023. Sin embargo, la mayoría de estos países reanudaron su apoyo tras el informe de Colonna, aunque con condiciones de mayor supervisión. En contraste, España aprobó una contribución de 13,5 millones de euros en abril de 2025, según reportes de La Gaceta.
La UNRWA, fundada en 1949, proporciona asistencia humanitaria y educación a 5,9 millones de refugiados palestinos en Jordania, Líbano, Siria y los territorios palestinos. En Gaza, la agencia opera 284 escuelas y 22 centros de salud, empleando a 13.000 personas, la mayoría palestinos locales. Su presupuesto anual, de aproximadamente 1.200 millones de dólares, depende en gran medida de donaciones internacionales.
Contexto histórico y tensiones continuas
Las tensiones entre Israel y la UNRWA datan de décadas, pero se han intensificado desde los ataques de Hamás en 2023. Israel sostiene que la UNRWA perpetúa la guerra al mantener el estatus de refugiado para millones de palestinos y no promover su integración en los países anfitriones. La UNRWA argumenta que su mandato, establecido por la Asamblea general de la ONU, se centra en la asistencia humanitaria hasta que se alcance una solución política.
En abril de 2025, funcionarios israelíes ingresaron a seis escuelas de la UNRWA en Jerusalén Este y ordenaron su cierre en 30 días, según informó la periodista Olga Rodríguez. Estas escuelas atienden a niños refugiados palestinos. La UNRWA condenó la acción, calificándola como una violación de su inmunidad diplomática.
El nombramiento de Ian Martin se produce en un momento de incertidumbre para la UNRWA, con donantes exigiendo mayor transparencia y reformas. La agencia enfrenta un déficit presupuestario proyectado de 100 millones de dólares para 2025, según un informe interno de la ONU. Mientras tanto, las operaciones en Gaza continúan bajo condiciones de extrema dificultad debido al conflicto en curso.
La revisión liderada por Martin se espera que presente recomendaciones antes de finales de 2025, con el objetivo de fortalecer la UNRWA y abordar las preocupaciones de los donantes y de Israel. Sin embargo, las profundas divisiones políticas en torno a la agencia sugieren que cualquier reforma enfrentará obstáculos significativos.