Siria se quejó el jueves ante la ONU tras un ataque aéreo contra un sitio militar sirio que adjudica a Israel.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Siria exigió que el Consejo de Seguridad de la ONU condene las «reiteradas agresiones del país» y «tome una medida inmediata y decisiva para detenerlas de acuerdo con sus resoluciones relacionadas con la lucha contra el terrorismo».
La carta afirmaba que tales ataques «complementan los crímenes de ISIS» e «intensifican la situación y desestabilizan la región y el mundo».
«Los repetidos ataques israelíes se han convertido en un comportamiento sistemático con el objetivo de proteger a los terroristas de Jabhat al-Nusra e ISIS», dijo el ministerio en su carta, citada en la agencia oficial de noticias de Siria, SANA.
El ejército sirio amenazó el jueves con «consecuencias peligrosas» después del ataque aéreo.
«Esta beligerancia es un descarado intento de elevar la moral de la organización terrorista ISIS, que se encuentra en un estado de colapso después de las aplastantes victorias del ejército sirio contra el terror en más de un frente», dijo el ejército.
«El agresivo ataque israelí podría tener consecuencias peligrosas sobre la estabilidad y la seguridad en la región», agregó.
El ataque aéreo se dirigió contra un centro militar y científico sirio en el que se producen armas químicas y bombas de cañón que han matado a miles de civiles sirios.