Se espera que el exministro de Turismo y Antigüedades de Egipto, Khaled El-Enany, sea confirmado hoy como director de la UNESCO, a pesar de las críticas de grupos patrimoniales que sostienen que no protegió los tesoros culturales de su país, como la “Ciudad de los Muertos” de El Cairo.
Enany, de 54 años, fue elegido el mes pasado por el Consejo Ejecutivo de la UNESCO, compuesto por 58 miembros, con 55 votos, superando a Edouard Firmin Matoko, de Congo-Brazzaville. Su nombramiento como primer director general árabe de la agencia cultural y educativa de la ONU será sometido a una votación formal de confirmación por parte de los 194 Estados miembros durante la conferencia general de la organización en Samarcanda, Uzbekistán.
La ONG World Heritage Watch, con sede en Berlín, pidió la semana pasada a los países reconsiderar el nombramiento, alegando que el historial de Enany como ministro genera dudas sobre su compromiso con la preservación de los sitios culturales.
En una carta firmada por más de 50 organizaciones y expertos, se citan la demolición de partes de la necrópolis histórica de El Cairo, la “Ciudad de los Muertos”, y la expansión de obras turísticas cerca del Monasterio de Santa Catalina, en el Sinaí, ambos reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
“Es irresponsable confiar el cargo más alto de la organización responsable de preservar el patrimonio mundial a alguien con ese pasado”, señaló el grupo.
Reuters no logró contactar a Enany para obtener comentarios. Antes de la votación del consejo ejecutivo del mes pasado, su campaña explicó que él estaba demasiado ocupado para responder a las preguntas enviadas por Reuters sobre las críticas a su gestión. La campaña añadió en un comunicado que “el desafortunado megaproyecto que el gobierno decidió realizar en la zona de Santa Catalina está actualmente detenido”.
Tras su elección, la campaña evitó ofrecer más declaraciones y remitió las preguntas a la Secretaría de la UNESCO, que no respondió de inmediato a la solicitud de comentarios.
