El enviado estadounidense en Oriente Medio Jason Greenblatt criticó el jueves al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, por no mencionar la conexión del judaísmo con Jerusalén en un discurso esta semana.
Hablando en un festival al que denominaron Jerusalén Capital de la Juventud Musulmana 2018 en Ramallah el martes, Abbas enfatizó repetidamente que Jerusalén era una ciudad para musulmanes y cristianos, sin mencionar nada de la extensa historia judía de la Ciudad.
«Abbas dice acerca de Jerusalén: «es árabe, musulmana y cristiana». Y no hace mención de ningún vínculo judío. Nada pacífico o productivo puede provenir de declaraciones como esta», dijo Greenblatt en una serie de tweets.
«La paz duradera no se logrará negando los miles de años de vínculos del judaísmo con Jerusalén. Jerusalén es santa para los musulmanes, los cristianos y los judíos», agregó el enviado de Estados Unidos, recordando el reconocimiento del presidente Donald Trump en diciembre de la ciudad como la capital de Israel.
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Al anunciar su decisión, Trump también declaró que trasladaría la embajada de EE.UU. de Tel Aviv a Jerusalén. La medida enfureció a los líderes de la Autoridad Palestina, que declararon que Washington ya no puede cumplir el papel decisivo en el proceso de paz que ha mantenido durante más de dos décadas.
Los árabes, que rechazaron su estatidad en 1948 y que desde 1967, cuando Israel liberó Jerusalén de la ocupación jordana, se hacen llamar “palestinos”, ahora recurren a la argucia política de pretender a Jerusalén como la capital de su futuro Estado.
En los muchos discursos que Abbas ha dado sobre Jerusalén desde la decisión de Trump, generalmente ha enfatizado la conexión musulmana y cristiana con la Ciudad Santa, mientras que al mismo tiempo, en sus discursos fuera de Ramallah promete que si Jerusalén queda bajo control palestino, estaría abierta a la libertad de culto para todas las religiones, incluso para los judíos.
El martes, sin embargo, omitió su repetida promesa de permitir a los judíos rezar en una Jerusalén controlada por los palestinos.
Autoridad Palestina Mahmoud Abbas (C) asiste a la «Conferencia de Jerusalén como la Capital de la Juventud Islámica» en la ciudad cisjordana de Ramallah el 6 de febrero de 2018. (AFP PHOTO / ABBAS MOMANI)
La población palestina es en gran parte musulmana, pero también tiene una minoría cristiana considerable.
Greenblatt ha sido criticado por los funcionarios de la AP, que lo calificaron de «sionista estadounidense» por su defensa de la política estadounidense sobre Jerusalén, así como por sus propias críticas a la Autoridad Palestina por boicotear los esfuerzos estadounidenses para impulsar las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos.
«A Greenblatt no le importa la opinión de los palestinos«, dijo el lunes el ministerio de Asuntos Exteriores de la Autoridad Palestina. «Sus comentarios muestran que no cree que los palestinos sean parte del proceso político».
En referencia al plan de paz de la administración Trump, cuyos detalles aún no se han anunciado, el ministerio de la AP afirmó que eludía a los palestinos.
«Si Greenblatt quiere abrir canales entre Israel y algunos países árabes, al tiempo que excluye a los palestinos, enfatizamos que nadie en la región se atrevería a aceptar un plan estadounidense que deje la dimensión palestina o abandone Jerusalén», dijo. «Por esta razón, creemos que el plan de Greenblatt y su grupo sionista está condenado al fracaso».