Dos residentes israelíes de la Galilea fueron detenidos el mes pasado por operar en nombre del grupo terrorista libanés Hezbolá o bajo órdenes de Irán, anunció el domingo la agencia de seguridad Shin Bet.
Los dos hombres, Sultan Atallah, de 55 años, de Yarka, y Rami Shammi, de 33 años, de Jadeidi-Makr, han sido condenados en el pasado por contrabando de drogas desde el Líbano, dijo el Shin Bet.
Los dos hombres estaban en contacto con un contrabandista de drogas libanés en Turquía que está relacionado con Hezbolá y ha sido encarcelado anteriormente en Israel, dijo la agencia.
En noviembre, la pareja se reunió con el agente de Hezbolá y supuestamente se les pidió que introdujeran armas de contrabando en Israel y las escondieran para que las encontraran otros agentes de Hezbolá en Israel.
También se les pidió que prepararan el terreno para llevar a cabo atentados terroristas en Israel, que identificaran lugares sensibles a los que Hezbolá pudiera apuntar con misiles y que llevaran a cabo un secuestro en Israel.
Durante la investigación se incautó un subfusil MP5 a los sospechosos.
“Este asunto ilustra los esfuerzos de los elementos terroristas iraníes y de otros países para explotar a los ciudadanos árabes y drusos de Israel”, dijo un alto funcionario del Shin Bet. “Los ciudadanos que reciben consultas de elementos terroristas están llamados a informar de ello a las autoridades y a evitar una situación en la que se vean envueltos en graves actividades de seguridad”.
Atallah y Shami iban a ser acusados más tarde el domingo, tras una investigación conjunta del Shin Bet, las Fuerzas de Defensa de Israel y la Policía de Israel, dijeron los funcionarios.
“Durante el año pasado, el eje chiíta dirigido por el régimen iraní y sus apoderados terroristas en todo Oriente Medio han promovido activamente los ataques y el contrabando de armas en Israel”, dijeron las FDI en un comunicado.
El ejército dijo que había establecido un grupo de trabajo con la policía y otras autoridades para hacer frente a los intentos de contrabando, en medio de un aumento de los casos en los últimos meses.
Funcionarios israelíes han señalado a un alto funcionario de Hezbolá llamado Hajj Khalil Harb como el responsable de coordinar los intentos de contrabando hacia el norte de Israel. Harb, presuntamente un alto asesor del jefe terrorista de Hezbolá, Hassan Nasrallah, está acusado de dirigir personalmente al operativo de Hezbolá que se reunió con los dos sospechosos en noviembre.
Se cree que, dado que el Líbano se enfrenta a una importante crisis financiera, Hezbolá prefiere armar a otros para un ataque dentro de Israel en lugar de una agresión directa en la frontera, según han dicho anteriormente los funcionarios.
Un funcionario de seguridad advirtió el domingo que Irán busca vengarse de Israel por diversas acciones contra él, transfiriendo armas a “células durmientes” de Hezbolá que atacarían a altos funcionarios, militares y políticos israelíes.
En julio, las tropas israelíes interceptaron lo que fue el mayor intento de los últimos años de contrabando de armas a través de la frontera desde el Líbano, según las autoridades.
Los funcionarios policiales creían que esas armas se dirigían a organizaciones criminales de la comunidad árabe, donde también estarían disponibles para ataques terroristas en caso de que se produjera otro aumento de la violencia entre judíos y árabes.